Real Sociedad, cuando Baraja todavía no se atrevía con sus chavales

Hace poco más de siete meses que Baraja está al mando de las riendas del Valencia CF. En todo este tiempo, el vallisoletano se ha ganado todo el respeto del valencianismo, uno que ya tenía, y no solo por ser el maestro que evitó que un Valencia es estado crítico perdiera la categoría. Pues, además de todo aquello, que ya queda muy lejos, aunque todavía hoy se hable de que ese sigue siendo el objetivo, Baraja está siendo, junto a sus pupilos, la esperanza de toda una afición. La bautizada como "Quinta del Chupete" o "Quinta del Pipo" está siendo la sensación, y la salvación, de un Valencia que está dando mucha Guerra. Pero esto no siempre ha sido así, aún con Baraja al mando.

El último partido que el Valencia se enfrentó a la Real Sociedad en Mestalla, supuso la primera victoria del vallisoletano como entrenador blanquinegro. Para aquel partido, que se remonta al pasado 25 de febrero, entre los once elegidos para hacer frente a todo un equipo de Champions no se encontraba ninguno de los canteranos que a día de hoy sería impensable no verlos entre los titulares. Para aquel partido, en el que Samu Castillejo, junto a Lino y Hugo Duro componían la línea ofensiva, tan solo Jesús Vázquez contó con minutos. 

Baraja apostó por la cantera y encontró oro

Y es que, Rubén Baraja, no apostó por la cantera desde el principio. La veteranía y la experiencia fueron dos de los pilares que sostuvieron la pizarra del Pipo en un inicio, que tenía el gran reto de la permanencia con un plan a contrarreloj, que debía encontrar la fórmula para ganar partidos. Y esa fórmula llegó de las botas de los más jóvenes.

A día de hoy, los nombres de Javi Guerra, Diego López, Jesús Vázquez, Cristian Mosquera, Sergi Canós, Fran Pérez o Alberto Marí, a pesar de su lesión, se traducen como piezas claves en la pizarra de Baraja. Una pizarra condicionada por la corta capacidad de plantilla del equipo y la mala fortuna con las lesiones, que parece que ya no se sostiene sin los más jóvenes. Y no es para menos, puesto que el papel de "los chavales", está siendo determinante en el desarrollo de la temporada del Valencia CF.

Javi Guerra y Diego López, dos de los más destacados

Entre los nombres más detacables se encuentra el de Javi Guerra, puesto el canterano, de tan solo 20 años, ya se posiciona como uno de los referentes valencianistas tanto dentro como fuera del campo. Guerra ha conseguido ver portería hasta en tres ocasiones en los seis partidos que se han disputado hasta la fecha. Es decir, que mantiene una estadística de un gol cada dos partidos. Su actuación en Almería, la pasada jornada, lo coronó con un gol, a pesar del empate y también fue uno de los más coreados en el partido ante en Atlético, en el que consiguió firmar el tercero pasado el minuto 50. El peso del jugador en el equipo es más que evidente, aunque no empezó a ser uno de los indispensables hasta el pasado mes de abril, cuando anotó su primer tanto con el primer equipo, ante el Real Valladolid.

Como él, ocurre con el resto de los "chavales" de Baraja, puesto que el caso de Diego López es algo parecido. El jugador asturiano, de 21 años, destacó en la Academia VCF y su sobresaliente lo empujó hasta el primer equipo, aunque no tuvo la oportunidad de responder hasta el tramo final de la pasada temporada. López se estrenó como goleador con el 1-0 que sumó los tres puntos ante el Real Madrid en aquel partido que terminó con el cierre de la grada de animación de Mestalla tras el Caso Vinicius.