Nuevos petos, nuevos patucos, nuevas incógnitas tecnológicas
El taekwondo cambió sus normas de juego en la antesala de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, el escenario elegido por la federación internacional de la disciplina para testar los nuevos sensores incrustados en patucos y petos.
Lucía Santiago
Son más numerosos pero también más duros, por lo que el último mes de preparación derivó en una lucha contrarreloj para los 128 deportistas que competirán en la ciudad carioca. Todos deseaban llegar plenamente adaptados a sus nuevas herramientas, pero ninguno comparecerá en Río con la convicción de tenerlas dominadas.
"Hemos tocado los patucos y los petos poquito. Yo he podido hacer apenas ocho combates con el nuevo sistema", aseguró a EFE el español Joel González, vigente campeón olímpico en menos de 58 kilos. "Casi, casi los probaremos aquí y no sé bien cómo irá la cosa. Es una pena jugarse los Juegos así", lamentó el gerundense, de 26 años.
En el torneo olímpico de Río 2016, él persigue su segundo oro consecutivo tras haberse proclamado campeón en Londres 2012.
Esta vez, intentará ascender al primer puesto del podio con diez kilos más, en la categoría de menos de 68.
A la dificultad de competir en "la categoría de las estrellas" -donde se citan cinco deportistas que fueron medallistas hace cuatro años en la capital inglesa- se suma la incógnita del nuevo sistema de detección de los contactos. "Empezamos a jugar con ellos hace nada. Esperemos que, esta vez, que es la primera que los utilizaremos en competición, salga bien", deseó.
Como un proceso "muy duro" describió Eva Calvo, vigente subcampeona del mundo en menos de 57 kilogramos, el cambio de los petos y de los patucos. "Al principio me costó mucho, con ellos es muy difícil puntuar", expuso consciente de que en Río de Janeiro muchos combates podrían decidirse por una diferencia mínima.
En la última concentración que completó en el Centro de Alto Rendimiento de Madrid, junto al también olímpico Jesús Tortosa, la adaptación a los nuevos elementos consumió gran parte de su tiempo.
"Lo positivo es que creo que le hemos pillado el truco y que no habrá problema", comentó a EFE.
Tanto ella como Joel González contarán con una 'ventaja' sobre Jesús Tortosa. La categoría del madrileño se desarrollará el día de 17 de agosto en el Carioca Arena 3. La de Eva y Joel, el 18.
"Nosotros dos tendremos la suerte de poder ver en la primera jornada de competición cómo funcionan y variar la táctica si vemos que se puntúa más fácil de otra forma. En todo caso, creo que será una cuestión de irse adaptando conforme la marcha", apuntó el catalán, incómodo por no saber "qué va a pasar".
"Esta situación te genera un poco incertidumbre. Habrá que jugar a que no te toquen", anunció.
Estos cambios, según el prisma de Joel González, prosiguen el rumbo marcado por el taekwondo en el año 2008.
"Si haces un poco el seguimiento desde los Juegos de Pekín, pasando por los de Londres 2012 y llegando a Río 2016, te das cuenta de que el taekwondo está en constante evolución. Querían quitar la subjetividad de los árbitros pero ahora ha habido cambios demasiado cercanos a los Juegos", remarcó.
"En el último Europeo ya competimos con los nuevos petos y esta vez decidieron cambiar los patucos hace bien poco", denunció.