Urrutikoetxea: "Hay muchas ganas de volver a jugar una final"
"Aimar Olaizola y yo tenemos una gran relación. Es muy inteligente, sabe mucho de pelota y para todos los pelotaris de Baiko Pilota debe ser un referente. Hemos hecho un poco de todo y he quedado satisfecho", dejó dicho con indisimulada admiración. Y es que Mikel Urrutikoetxea y el histórico delantero de Goizueta entrenaron juntos el martes en el frontón Bizkaia de Bilbao.
El pelotari de Zaratamo afronta este sábado el envite de semifinales del Manomanista 2019 frente a Joseba Ezkurdia en el recinto de Miribilla. El vizcaíno está con hambre de triunfos y no lo oculta. Vuelve a ir a por todas. "Hay muchas ganas de volver a jugar una final. Es muy difícil llegar a ellas y sería muy bonito jugar mi tercera final del Manomanista", comentaba con ambición en 'Fuera de Juego' de Radio Euskadi.
36 años después vuelve a haber dos pelotaris de Bizkaia en las 'semis', Urruti y su paisano de Zaratamo Danel Elezkano, que jugará ante Iker Irribarria. "Últimamente me estoy encontrando cómodo y estoy disfrutando. Esto va por rachas. Desde 2015 los resultados están siendo bastante buenos y quiero jugar otra final. Será un partido muy difícil, Ezkurdia está muy bien", añade Mikel.
"Seguramente sea un partido reñido. Ojalá sea así para que lo disfruten los pelotazales. A estas alturas, cada partido es complicado. Más que el juego de Ezkurdia me preocupa cómo me voy a encontrar yo. Si saco mi juego, lo que he entrenado los últimos meses, puedo estar cerca de ganar", aseveraba.
"Para nada hay presión por ser la única baza de Baiko Pilota para ganar el Manomanista", precisaba antes de aclarar ante la polémica creada que "no hay ninguna excusa con el frontón, lo sabíamos desde el día de la presentación del torneo. Es un frontón bueno para ambos".
La opinión de Ezkurdia de la semifinal
Por su parte, Ezkurdia, el pelotari de Arbizu, tras ganar el Cuatro y Medio y el Parejas en 2018, significaba en el mismo programa radiofónico que "vi a Urrutikoetxea con hambre de pelota, y eso me obliga a estar más centrado. Le gané en el 'Cuatro y medio' y eso me da más confianza. Ahora creo más en mí".
"Si consigo imprimir mi ritmo al partido le puedo hacer mucho daño a Urrutikoetxea, así que me tengo que centrar en eso", destacaba el delantero de Aspe de 28 años y 1'91 de estatura.
"Me hubiera gustado jugar en un frontón en el que pudiera imprimir más ritmo y darle más velocidad a la pelota, pero no hay excusas porque es un buen frontón", precisaba a su vez sobre el Bizkaia.
"Estoy contento y ojalá durante muchos años me tengan como favorito o candidato a las txapelas. Quiero estar ahí el mayor tiempo posible. Antes me podía más esa presión pero ahora me lo tomo de otra manera. Estoy disfrutando", lanzaba. Este miércoles elección de material.