Pellegrini tiene la llave

La temporada que arranca con ilusiones renovadas para el Betis tiene en Manuel Pellegrini como su gran fichaje. Más allá de los movimientos que se han hecho y los que se puedan concretar en lo que queda de mercado, gran parte de lo que suceda en este nuevo curso queda en manos del chileno, quien con su pericia y experiencia debe dar un plus imprescindible desde el banquillo.

Esa es la verdadera apuesta del Betis para este curso con una plantilla prácticamente idéntica a la del año pasado. Un grupo de futbolistas que rindió muy por debajo de lo deseable en un último año horrendo y que tiene mucho más en sus botas que el decimoquinto puesto que firmó. Pellegrini es la esperanza bética para demostrar si era cierta la valía que se le presuponía al grupo de jugadores..

Los futbolistas que salieron del club este verano tuvieron un rol muy secundario y los que llegaron no apuntan a ser protagonistas, salvo Claudio Bravo. Aunque luego el fútbol y los rendimientos dictarán. Es por tanto la capacidad de Pellegrini la que debe elevar las prestaciones del equipo. El diagnóstico es claro para cualquiera que haya visto al Betis de los últimos años. Necesita mejorar defensivamente y elevar su competitividad. La solución y cómo hacerlo ya queda en manos del entrenador.

Hay mimbres para más de lo que se vio el año pasado. El currículum y la trayectoria de Pellegrini generan la mayor expectación alrededor del técnico que ahora deberá demostrarlo en Heliópolis. La pretemporada apuntó maneras, aunque no deja de ser eso, partidos de preparación. Ahora llega el momento de verdad, con los partidos oficiales, con puntos que cuentan y ahí se podrá empezar a valorar al chileno.

Su llegada y la de Antonio Cordón generaron un gran consenso inicial que ahora necesita resultados. La mano del director deportivo, por la situación del fútbol y del Betis en este extraño verano del covid, probablemente se pueda valorar a medio plazo sin eximirle de responsabilidad, en lo positivo y negativo que suceda. La incidencia del entrenador debe ser más inmediata.

El Betis de los últimos años no ha encontrado a un entrenador que le haya otorgado un plus imprescindible. No hay más que repasar las últimas temporadas. Ninguno cuajó, más allá la media temporada final del primer año de Setién. Es tiempo de entrenador para una plantilla que tiene una reválida. El año de Pellegrini y de él dependerá mucho de lo que suceda.