El Poder
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Precisamente en la celebración del 8 M tenemos que reflexionar sobre el terremoto que ha supuesto las noticias que se han sucedido esta semana en relación al futuro del futbol femenino y la propuesta de la RFEF de creación de un nuevo formato competitivo para el año próximo.
Personalmente creo que el androcentrismo explica muy bien esta situación. Este concepto se suele definir como “la tendencia de posicionar la experiencia del hombre en el centro de las explicaciones sobre el mundo”. Y eso significa no poner en el centro a las mujeres (en este caso a las jugadoras).
En el caso de la problemática suscitada esta semana es evidente que hay tres nombres de hombres que lideran las propuestas para tomar cualquier tipo de decisión. Dos de ellos de manera muy evidente: Tebas y Rubiales. Otro de ellos de manera menos evidente: Jorge Vilda. Todos ellos tienen sus intereses que están relacionados mayormente con el poder.
El futbol femenino llevaba desde hace bastante tiempo un proceso de crecimiento continuado a un ritmo probablemente moderadamente lento. Desde la incorporación de la Liga es evidente que se ha producido un acelerón muy importante (fundamentalmente en la parte superior de la Pirámide que no en la inferior). La entrada de un patrocinador principal, las televisiones, aumento de los recursos son resultados evidentes que nadie puede negar. Se ha levantado un interés en determinados segmentos de fans del futbol que solamente prestaban atención al futbol masculino. Hay más medios interesados en el futbol femenino.
El producto era más bonito, más apetecible y por lo tanto más vendible.
Si en el horizonte se vislumbra negocio aparecen los intereses en controlar el negocio. En una guerra abierta entre dos instituciones como la LPF y la RFEF (aunque realmente no sé si se trata de una guerra personal) en la que se instrumentaliza a las personas e incluso a los sindicatos (lo de AFE y futbolistas On es tremendo) el único perjuicio será para las jugadoras de futbol.
Algunos solamente piensan en su negocio, otros solamente piensan en el poder, algunos solamente piensan en la selección y todos ellos solamente piensan en las jugadoras como medios para conseguir sus fines. Personalmente creo que en esta historia no hay nadie libre de pecado y que se avecinan tiempos complicados.
Las personas que estamos en la base de la pirámide del futbol femenino asistimos verdaderamente atónitos a lo que está sucediendo. Una reforma de las categorías superiores de las categorías de futbol femenino como la aprobada en Asamblea del año pasado puede quedar en agua de borrajas y sin aplicarse según la propuesta adelantada esta pasada semana.
¿Qué pasa con las planificaciones hechas por los clubes?, ¿Cómo quedara la estructura la temporada próxima? ¿Cuándo se sabrá? ¿Serán capaces la Asociación de Clubes de Futbol Femenino y la Comisión de Futbol Femenino de la RFEF? Ojalá sean capaces de reconducir esta situación porque no conduce a nada bueno.
Para terminar debo de confesar que el comunicado publicado por el Athletic Club de Bilbao al respecto de este tema me ha resultado cuando menos sorprendente. Es evidente que el Club siempre (independientemente de la Directiva) ha estado mucho más cercano a la RFEF que a la Liga, pero el posicionamiento público ha sido muy rápido y no sé hasta que punto reflexionado internamente.
Lo único de debe guiar las decisiones que se tomen en este momento deben de ser las jugadoras de futbol. Pero no solamente las jugadoras de élite que ahora disfrutan de la Liga Iberdrola, sino todas las chicas que practican futbol en nuestro estado y aspiran a llegar a ese nivel. Háganlo por ellas, póngase de acuerdo por ellas.
Muchas personas han trabajado desde hace décadas por el futbol femenino y aspiraban a llegar a un escenario como el que se está construyendo. Ojala esto no se rompa por intereses crematísticos y guerras por el poder individual.
Por Iñaki Alonso, entrenador de futfem, especialista en ayuda internacional humanitaria y derechos de infancia