La paz en el Sevilla y el sueldo del presidente
Las grandes familias del Sevilla han sellado la paz esta semana y se ha vivido la Junta de accionistas más tranquila de los últimos años. Buenas noticias para el Sevilla. Castro gana tiempo para asentarse en el cargo y ganarse el derecho al sueldo que pide y, seguramente merece, y Del Nido Carrasco recupera la capacidad de maniobrar con las acciones de su familia. ¿Quién gana más? Veremos, pero en un principio, además de ganar el Sevilla, parece claro que gana más la familia Del Nido. Han conseguido romper Sevillistas de Nervión en tiempo récord y sin necesidad de que un juez tenga que decidir. Claro está que sus intenciones eran las más legítimas del mundo.
Pero volvamos a lo del sueldo del presidente. No creo que sea la madre del cordero, pero importa. Castro quiere un sueldo por su trabajo en el Sevilla y en su entorno más cercano aprietan para poner el asunto en manos del Consejo de administración del Sevilla. ¿Qué pasa entonces? Pues que nadie le pone el cascabel al gato. Está claro que el trabajo de Castro, que no vive del aire, debe estar recompensado. La decisión es si se le debe recompensar como a los dos grandes ejecutivos del club (Monchi y Cruz) o si su remuneración debe ser más acorde a la de un presidente que no entra en números y contratos y que tiene un papel mucho más representativo que ejecutivo. El propio Castro dijo no saber nada del asunto tras la Junta de accionistas, pero este tema acabará saliendo y convirtiéndose en otro foco de problemas con independencia de que la paz social ya esté firmada para los próximos tres años, pero... ¿y si la pelotita deja de entrar? ¿Y si Castro lo hace mal?