Aplaudidores contra abucheadores

Acabada la Junta de Accionistas del Betis, la noticia es que no hay noticia. ABA logró los apoyos necesarios y llevó a buen puerto todas sus propuestas. Enfrente, la coalición Lopera-Castaño trató de hacerse oir en su oposición a todas las propuestas del Consejo de Administración en una suerte de posturas encontradas al son de un concierto de aplausos, interrupciones y abucheos propios de cualquier cosa menos de un club serio. Cuando Castaño hablaba, buena parte de la sala interrumpía y la otra, los suyos, le jaleaba. Cuando lo hacía algún miembro del Consejo de Administración del Betis o algún accionista favorable a la gestión de este, lo mismo.
Al final, Castaño y Lopera votaban a todo que no. El resto votaba a todo que sí. Se cuestionaba desde el contrato con una empresa auditora hasta la temporada deportiva pasando por los hitos económicos, siendo la opinión de todos la misma para cada punto. Y yo pregunto: ¿No se puede aprobar la gestión económica y suspender la deportiva o viceversa? O retrotrayéndome a la previa de la Junta, ¿la crítica al actual consejo tiene que implicar necesariamente la adhesión a la vía Lopera-Castaño?
Protestaban los Supporters en la previa por la mediocridad que rezuma el club por todos sus poros y pedía uno de ellos, en una escena un tanto tensa con un miembro de Bitton, que todos, absolutamente todos los actores principales de esta interminable película de terror, llegasen a un acuerdo, acabasen con la guerra y remasen juntos en pos del crecimiento, bonita aspiración aunque imposible… al menos eso parece.
Mención aparte merecen los modos del presidente Haro, carente de profundidad en el discurso y sobrado de malos modos en las respuestas, actitud injustificable y nada a la altura del cargo que representa. Con sus formas, aplaudidores y abucheadores encuentran mayor justificación a su comportamiento. Feo, muy feo lo que se vivió en muchos momentos de la Junta.