Gerard Descarrega persigue sueños a la velocidad del atletismo paralímpico
David Ramiro,Madrid, 5 nov (EFE).- Gerard Descarrega es el hombre más rápido del atletismo paralímpico español. Posee 50.28 de marca junto a su guía Guillermo Rojo en los 400 metros lisos, distancia en la que fue medallista de oro en los Juegos de Río 2016 y de la que es actual campeón del mundo y de Europa de su categoría T11 para discapacitados visuales.,Descarrega (Reus, Tarragona; 1994) padece una ceguera total desde 2013 que no le impide perseguir sus sueños a ritmo de zancadas. Primero lo
David Ramiro
Madrid, 5 nov .- Gerard Descarrega es el hombre más rápido del atletismo paralímpico español. Posee 50.28 de marca junto a su guía Guillermo Rojo en los 400 metros lisos, distancia en la que fue medallista de oro en los Juegos de Río 2016 y de la que es actual campeón del mundo y de Europa de su categoría T11 para discapacitados visuales.
Descarrega (Reus, Tarragona; 1994) padece una ceguera total desde 2013 que no le impide perseguir sus sueños a ritmo de zancadas. Primero lo hizo junto a Marcos Blanquiño y desde el año pasado con Guillermo Rojo de guía, con el que espera conseguir grandes éxitos en el Mundial de atletismo paralímpico de Dubai (7-15 noviembre) y después los Juegos de Tokio 2020.
P: ¿Cómo llega a este Mundial?
R: Llegamos bien, en las mejores condiciones. Si no se tuerce nada y no cometemos un error o enfermamos estaremos para pelear por todo.
P: ¿Qué distancias va a correr?
R: Los 400 es el objetivo principal e importante y luego el 100, que lo haremos después. Esa distancia es un poco para ver qué tal estamos de marcas, aunque no creo que seamos muy competitivos porque no entrenamos para ello.
P: Desde los Juegos de Río en 2016 ha ganado Mundial y Europeo. ¿El objetivo es de nuevo lo más alto del podio?
R: Las medallas son la consecuencia del trabajo bien hecho y nosotros nos centramos en mejorar las marcas. Si luego los rivales nos ganan no quedará más remedio que darles un abrazo, pero si estamos en nuestras marcas los rivales tendrán que correr mucho para superarnos.
P: ¿El objetivo es bajar de los 50 segundos?
R: Es el objetivo que me he marcado en esta nueva etapa. Luego saldrá una cosa u otra, porque son dos carreras y se tienen que dar las condiciones idóneas físicas, mentales, climatológicas... Trabajamos para ello, pero si no bajamos de ese tiempo no será un drama y si logramos la medalla el objetivo también estará cumplido. Ahora mismo la marca la tenemos en 50.28. La realizamos en el último Campeonato de España de Fuenlabrada en verano, pero ese día corrimos solos, hacía buen tiempo, no teníamos tensión competitiva y ahora espero que en el Mundial sea distinto para bajar esas décimas.
P: ¿Cómo les puede afectar el calor?
R: En nuestra prueba creo que no nos va a influir mucho porque estaremos en 35 o 36 grados y se puede aguantar siempre que no se llegue a los 40 grados y los 90 de humedad.
P: El año pasado cambió de guía. Llevaba con Marcos Blanquiño desde 2013 y una lesión suya le obligó a correr con Guillermo Rojo.
R: La relación con Guillermo tanto dentro como fuera de la pista es espectacular. Tiene un nivelazo y en ningún momento me veo limitado en ninguna parte de la carrera. Él solo está centrado en guiarme, porque en nivel de velocidad va bastante sobrado. Solo nos centramos en coordinarnos. Además nos llevamos genial, hacemos muchas cosas y ha sido un buen descubrimiento tanto a nivel personal como de amistad.
P: ¿Por qué se produjo el cambio definitivo?
R: Son varios aspectos los que influyen. En deporte paralímpico ya tenemos suficientes limitaciones las personas que corremos enganchadas como para tener otras. El guía tiene que tener un nivel bastante superior al ciego para poder centrarse en guiarme y no estar ocupado en otro tipo de cosas. Hay que buscar optimizar al máximo las condiciones. Es jodido correr sin ver como para estar pendiente de otros factores.
P: ¿Cómo se comunica el cambio a un guía cuando llevas tanto tiempo?
R: Fue gracias a mi entrenador y a otra persona que trabaja en nuestro grupo, al que le contamos nuestros problemas y nos ayuda en situaciones complicadas. Fue duro. La visión mía era distinta a la otra parte y lamentablemente fue un poco desagradable la situación y un poco triste el desenlace.
P: ¿Ahora está contento?
R: Sí, tengo todas las condiciones para poder rendir y solo tengo que pensar en entrenar y ser lo mejor atleta que pueda. Los resultados saldrán o no, porque esto no es una bola de cristal, pero estoy tratando de poner todos los ingredientes para que salga bien.
P: ¿Cómo se convive con la ceguera y el atletismo?
R: Empecé en el atletismo porque tenia una enfermedad degenerativa y con un resto visual para otros deportes no me daba la vista. El atletismo era lo más fácil para la agudeza visual porque es correr y no se necesita tanta. Al principio me lo tomé como una afición, pero luego me lo fui tomando con más dedicación y aquí estoy, porque desde 2013 me quedé ciego total y necesito un guía para todo.
P: ¿Cómo es su vida en Madrid?
R: Los años de atrás estuve viviendo con mi chica, pero para este la Federación me dijo que no podía estar en la Blume y en un piso a la vez, así que tuve que elegir. La mejor opción era que mi chica, que es de Sevilla, se fuera para allí con la familia. Es un poco duro, pero en un futuro espero que sea mejor. Fue difícil de decidir pero era lo mejor para todos. Después de Tokio ya veremos porque tengo una hija de año y medio pero hay que compaginarlo.
P: ¿Siente el apoyo de la familia?
R: Estos meses son duros, nos vemos menos, pero sí me apoyan, porque sin ellos sería difícil.
P: ¿Qué rutina de trabajo sigue?
R: Depende mucho de la semana de trabajo, de si es semana de carga, de volumen o hay competición, pero solemos hacer ciclos de seis días de entrenamientos.
P: ¿Cómo ve la evolución del movimiento paralímpico?
R: Cada vez va a más, nos conoce más gente y nos podemos dedicar mejor al deporte. Personalmente me considero un privilegiado, aunque no soy un futbolista y tengo que pensar en un futuro. Me he sacado la carrera de Psicología.
No tengo un contrato millonario, pero mientras tenga resultados puedo vivir de esto. Hay que tener un plan b porque después de esto hay que trabajar. También he empezado Derecho, en la UCAM de Murcia, que me dan un buen apoyo, y estoy muy contento porque nos lo ponen muy fácil.
P: ¿Tokio se ve lejos o no lo piensa?
R: No lo pienso. Estoy centrado en esto y sería un error pensarlo, aunque lo que sí que puedo decir es que me ilusiona mucho.