El CD Tenerife vuelve a tener vida. El cuadro isleño ha logrado este domingo un triunfo ante el Albacete Balompié de enorme valor, que le permite escalar un puesto en la clasificación, aunque aún a 8 puntos de la salvación. Todo ello en un partido marcado por el brillo y la determinación de Luismi Cruz y la expulsión de Waldo con roja directa a los 62 minutos.
El Tenerife se adelantó pronto, a los 7 minutos. Fue desde el saque de esquina: Luismi la puso con la zurda y José León se elevó por encima de la defensa para cabecear al fondo de la red y poner el 1-0 en el marcador.
La primera mitad tuvo alternativas y ocasiones en los dos bandos, pero no se volvió a mover el marcador. Y tras el descanso, el 2-0: otra asistencia de Luismi desde la esquina para que Enric Gallego cabeceara en el primer palo y doblara la ventaja tinerfeña.
La alegría era total en el Heliodoro, pero todo se empezó a torcer a los 55 minutos. José León cometió un brusco penalti que paró Edgar Badía a la primera, pero no a la segunda: Morcillo aprovechó el rechace para poner el 2-1. Y apenas un rato después, Waldo vio la roja directa por un plantillazo y dejó a su equipo con diez.
Álvaro Cervera quitó en ese momento a Luismi. Tocaba defender y el Tenerife lo hizo de maravilla, no sólo aguantando media hora en inferioridad sino que, además, marcó el 3-1 definitivo gracias a Maikel Mesa en el tiempo añadido.
Por sus dos asistencias y gran partido, Luismi Cruz el Jugador Hyundai del Tenerife-Albacete.