Ibon Navarro: "Tengo dos apuestas a que el Málaga va a subir y pienso ganarlas"

El entrenador del Unicaja, Ibon Navarro, tiene un cariño cada vez más especial al Málaga CF. Es hincha del Athletic Club y de Baskonia, clubes de su corazón, aunque el malaguismo cada vez se contagia más. Una vez acabada la temporada, con la consecución del primer título de BCL de la historia del club, el técnico vitoriano ha pasado revista en Ser Deportivos y ha declarado que es un soldado de Pellicer, con quien tiene una muy buena relación. Ya visitó a la plantilla y al cuerpo técnico hace unas semanas en un entrenamiento.

"Soy hombre de Pellicer", dijo Ibon, que se abrió a dirigir estas palabras hacia el club de Martiricos: "Tengo dos apuestas a que el Málaga va a subir y pienso ganarlas. Cuando un equipo sufre tanto durante la temporada aprende a sufrir y eso es una cosa importante".

Confía en el ascenso del equipo blanquiazul, que se ve tan cerca y a la vez tan lejos. A dos partidos de la gloria. "Creo que es algo que el Málaga ha hecho durante el año y ahora va a obtener sus réditos. Les deseo toda la suerte del mundo. Estoy convencido de que nos va a ir bien en los próximos quince días", asegura. El Nàstic es el último escollo e Ibon animará desde la distancia y desde la comodidad de unas merecidas vacaciones, aunque a mediados de agosto ya estará arrancando la pretemporada con Unicaja.

El sábado pasado, dos horas antes del duelo ante el Celta Fortuna, se dio un recibimiento de los que quedan en la memoria para siempre. Miles de gargantas alentando a la llegada del autobús, que casi no podía avanzar por la abarrotada avenida de La Palmilla. Algo especial para un club con afición de Primera, y no Federación. "Lo vi, lo vi. Fue espectacular. Hay cosas que solamente pueden pasar en Málaga y que si las explicas no las entiende nadie", resumía Ibon.

"Yo he ido a la Rosaleda y allí hay veinticinco mil tíos en Primera RFEF. Y eso no es muy normal. Entonces me choca mucho el impacto que tiene el deporte en la ciudad a nivel de pasión, a nivel emoción diría yo, ¿no?", decía recientemente el entrenador vasco a El Español. "Me parece que es una cosa… La gente en lugar de dar la espalda al equipo de fútbol, va más todavía. Y eso me parece que es una cosa muy distinta a lo que hay por ahí".

El plan de Ibon continúa

El Unicaja ha terminado con nota sobresaliente una temporada histórica donde ganó un título europeo en Belgrado y arrebató a Madrid y Barça el liderato de la ACB, algo que ningún equipo hacía desde la campaña 2008/09, en la que el Baskonia consiguió liderar la clasificación de la fase regular. UCAM Murcia, en el quinto partido de semifinales, privó a los cajistas del sueño de luchar por el torfeo liguero que solo han ganado una vez, con Sergio Scariolo en 2006. El año que viene lo volverán a intentas.

El cuadro malagueño ha sido capaz de ganar en los más pabellones más complejos: en el Palau al Barça (91-92), en el WiZink al Real Madrid (93-99), en el Buesa Arena a Baskonia (84-93) o en La Fonteta al Valencia Basket con contundencia (63-83). Han sido el equipo más anotador de la liga con 88'7 puntos por partido y el mejor recuperador del campeonato: 9'5 robos de promedio. También fueron la mejor defensa, recibiendo menos de 77 puntos por partido.

Y lo más importante: han logrado llenar el Martín Carpena como ningún otro pabellón en España, promediando más de nueve mil almas por partido. Varios con lleno total. Ese es el principal logro, que el baloncesto vuelva a ilusionar a una ciudad que también desea que su Málaga CF vuelva al fútbol profesional. El hermanamiento entre clubes es real y fuerte. El ascenso malaguista sería una victoria también para el Infierno Verde.