Lahm y el problema del fútbol italiano en Champions: "Deberían jugar como el Atlético"

Se abren los cuartos de final de la Champions League y lo hace con dos partidos espectaculares. Mientras todos los españoles tendremos los ojos puestos en el Arsenal-Real Madrid, en Europa también se estará disputando el Bayern-Inter. Un encuentro que ha analizado Philipp Lahm, leyenda bávara, que ha hablado de la falta de éxitos en el fútbol italiano.

"Los equipos italianos de hoy me recuerdan a un Ferrari al que le han reducido la potencia desde los 200 caballos, con el depósito medio lleno, y que se queda sin combustible a 10 vueltas de la meta", comenzó escribiendo el ex jugador del Bayern en 'The Guardian'.

Si ponemos la vista atrás, el Inter fue el último en ganar la Champions, con José Mourinho, en el Bernabéu en el año 2010. Precisamente, ante el Bayern. Y según Lahm, esto se debe a varios motivos. "Muchos clubes italianos ya no están en manos de patrocinadores de su país de origen, pero la crisis tiene una causa deportiva principal: en el campo, falta iniciativa, compromiso y capacidad atlética. Italia gasta mucho menos que las otras cuatro grandes ligas: España, Inglaterra, Francia y Alemania y encima los jugadores corren menos", reconoció.

El Atlético, la solución a los equipos italianos

Pese a las críticas, Lahm tiene clara la solución y se remonta a un partido doloroso para el Bayern. "Fuimos eliminados en las semifinales de la Champions de 2016 por el Atlético de Madrid. Nuestros rivales nos dieron 180 minutos de la máxima intensidad. No nos regalaron nada en ningún momento", comenzó diciendo sobre los rojiblancos.

"El fútbol de Diego Simeone me sigue impresionando. La buena noticia para Italia es que aún se puede ganar con un fútbol defensivo, pero hay que añadir algo más: potencia en la recuperación, actividad en la posesión, un afán incansable de conquista y ataque, el estilo Simeone. Se puede aprender mucho de la pasión de este entrenador argentino. De hecho, toda Italia debería jugar como el Atlético", zanjó con una conclusión clara para los equipos italianos.