Los riesgos que correría Jude Bellingham si no se opera de la lesión de su hombro, detallados por un fisioterapeuta

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La corta edad del futbolista le exige pasar por quirófano
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Si no se opera, el riesgo de recidiva es muy alto
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Hace más de un año, en noviembre de 2023, Jude Bellingham sufrió una caída sobre su hombro izquierdo que le provocó una luxación. Desde entonces, la opción de someterse a una intervención quirúrgica siempre ha estado sobre la mesa, pero se ha ido posponiendo por tema de calendario.
Este es el motivo por el que el mediapunta juega con una especie de 'armadura' que cubre todo su hombro izquierdo y parte de su torso y que durante el partido frente al Getafe pudo verse cómo el equipo médico se lo colocaba antes de entrar al terreno de juego.
Aunque la población general puede creer que es una prótesis, realmente "se trata de una ortesis y la usa para evitar la luxación recidivante del hombro", ha explicado el fisioterapeuta Fernando Ramos, presidente de la Asociación Española de Fisioterapeutas (AEF), a ElDesmarque.
Si bien la Cadena SER ha recordado que el futbolista tiene que operarse, el club aún no ha hablado de ninguna fecha concreta, sobre todo teniendo en cuenta que el Mundial de Clubes está a la vuelta de la esquina (arranca el 13 de junio) y si se opera, no llegaría a tiempo para competir.

¿Por qué Jude Bellingham tiene que operarse?
En su momento, el futbolista sufrió una luxación anterior de hombro izquierdo, concretamente "una luxación de tipo TUS; 'T' por el componente traumático de la misma, 'U' porque es unilateral, es decir, que se produce únicamente en un lado que puede llevar o no asociado lesión de Bankart -desgarro del tejido fibrocartilaginoso que rodea a la articulación del hombro- y 'S' que hace referencia a la necesidad quirúrgica", detalla el fisioterapeuta.
El motivo por el que la lesión del futbolista del club blanco exige pasar por quirófano se debe a la joven edad del mismo que provoca que "el tejido sea más elástico" y, por consiguiente, que el riesgo de re-luxación aumente.
De hecho, el profesional matiza que "en gente joven que no se opera, la tasa de recurrencia es del 90% y se reduce al 4% en los que se operan. De ahí que la indicación quirúrgica en deportistas jóvenes es muy clara, sobre todo si hay lesiones asociadas".

La ortesis solo pospone el tiempo para entrar a quirófano
De momento, Jude Bellingham juega con esta ortesis "para minimizar que en un contacto hombro con hombro o si sufre una caída en la que apoya el brazo amortigüe la recepción y no se produzca otra luxación", pero no podrá jugar así siempre.
Aunque es poco probable que esto ocurra, en caso de que sigan posponiendo la operación o decidan no operarle, le puede quedar "una microinestabilidad en la articulación del hombro que facilite o propicie con el paso de los años a la aparición de cuadros artrósicos de hombro. Y si esto progresa, terminaría necesitando una prótesis de hombro a futuro", concluye Fernando Ramos.