El plan del Betis con Jesús Rodríguez y una oferta mareante del Leipzig

El Betis mira ya al futuro, pero también al presente. Y en ambos aparece un nombre marcado en verde por la dirección deportiva: Jesús Rodríguez. El futuro del canterano es una incógnita, sobre todo porque el alcalareño tiene cartel tras su irrupción en la élite, a pesar de un gris final de temporada. El Betis ya ha marcado un plan con el jugador, con una mareante oferta del Leipzig que bien podría cambiar el rumbo de los acontecimientos este verano.

Como ha avanzado ABC Sevilla, el conjunto alemán está muy interesado en Jesús Rodríguez, al que ven como el nuevo Dani Olmo y un lugar en el que se apuesta mucho y bien por los futbolistas jóvenes. El Leipzig tiene en mente presentar una oferta que ronda los 20 millones de euros, aunque en el Betis la intención es que esa cifra supere los 30 millones.

La entidad verdiblanca, preparada desde hace tiempo para este tipo de movimientos, y como medida de blindaje a un canterano con mucho futuro, acordó con Jesús una cláusula de unos 50 millones de euros. Y la intención es partir, si finalmente hay decisión de dejar salir al chaval, de una cifra muy alta. De hecho, en los últimos días ha habido conversaciones entre el Betis y los agentes del futbolista para trazar un plan que satisfaga a todas las partes.

Un verano de llegadas y salidas

El verano se presenta de mucho trabajo para Manu Fajardo y su equipo, con la previsión de que haya varias llegadas y más salidas. Y en la posición de extremo izquierdo, los nombres de Abde y de Jesús Rodríguez copan un protagonismo interesante en lo que a ventas se refiere. El marroquí también tiene mercado, sobre todo después de su buen final de temporada y de su nivel, con gol incluido, en la final de la Conference League ante el Chelsea.

De hecho, el Betis se ha movido en el mercado para reforzar esa posición, con nombres importantes como Bryan Zaragoza, Moleiro y Raúl Moro sobre la mesa. Todo, o casi todo, dependerá de qué haga el Betis finalmente con Jesús Rodríguez. Porque el verano del canterano se presenta muy calentito.