ANTRO: un Limbo libertario al ritmo de la mejor música urbana

El trabajo nos hace libres rezaba el infame letrero que coronaba las puertas de Auschwitz I hasta hace apenas unos años. Una idea muchas veces explorada y que cobra vida en Antro, el nuevo título de Gatera Studio y que nos lleva a recorrer la homónima metrópolis subterránea. Un juego en el que deberemos escapar de las garras de una civilización sometida, al ritmo de la música urbana que tan bien ambienta todo este escenario.

En resumidas cuentas nos encontramos ante una especie de Limbo con nada sutiles guiños a Death Stranding. Toda una aventura de acción, puzles y plataformas 2.5D en un mundo claramente ambientado en 1984 pero donde la poderosa música es la base de todo. La coronación final de un juego que tenía previsto lanzarse en 2022. Pero un desarrollo accidentado en el que sufrieron todo tipo de problemas (muchos de ellos externos) les ha llevado a tener que picar piedra hasta el día de hoy, con excelentes resultados.

Bajo el yugo de el Gran Hermano

Tras el Colapso, solo un 1% de la población mundial ha logrado sobrevivir. Todos ellos se ven obligados a vivir bajo tierra y donde se han alzado refugios convertidos en ciudades como ANTRO. Como su propio nombre indica, es un lugar sucio y oscuro, además de hostil. Somos parte de una civilización que subsiste mediante trabajos forzados de un sistema totalitario, para el beneficio de la élite que gobierna y domina. No existe la libertad. No existe la expresión mediante el arte. Y cualquier acto que atente contra estas normas se considerará una rebelión castigada con la muerte.

Ahí aparece Nittch (bien jugado con el nombre). Un ciudadano que estaba conformado con esta vida nihilista, hasta que algo cambia que le hace despertar. Una misión de un desconocido que se tornará en nuestro único objetivo al tiempo que despiertan emociones que pensábamos que estarían dormidas para siempre, motivándonos a seguir hacia delante. Algo que hará que despertemos la atención de esa Cúpula que todo lo domina, mientras descubrimos que no estamos solos en esta idea discordante, ni mucho menos.

Las persecuciones son los acordes de este frenesí

Todo empieza cuando recibimos un misterioso paquete que deberemos entregar. Lo que hay en él carece de importancia para nosotros, pero no para los que lo necesitan. Y así es como empieza nuestro camino. En muchos momentos tendremos la tranquilidad de explorar, pararnos en algún minijuego para poder continuar, o reunir coleccionables que aportan una valiosa información, no solo a nivel de lore, si no también para el propio gameplay. O también encontrar otros secretos como los sprays, algunos de ellos ocultos, imprescindible para sacar todos los trofeos y logros.

Pero mucho ojo. Cuando la historia lo reclame todo se tornará en acción inmediata. Las persecuciones son relativamente exigentes debido al caos de no poder analizar a tiempo el entorno, ya que de hecho no tendremos libertad de movernos en otra dirección ni frenar. Incrementándose la adrenalina al ritmo de una música bastante más reveladora de lo que parece.

Una aventura al ritmo de la música urbana

Su punto más fuerte es quizá también su punto más débil. Algo totalmente subjetivo de cada jugador. Ya que toda la aventura, especialmente las mencionadas persecuciones, se mueve al ritmo de Hip Hop, Drill, R&B y música electrónica. De modo que si eres un amante del género lo gozarás muchísimo. Pero si no, se pierde gran parte de la esencia y el disfrute del mismo. Es como jugar a Brutal Legend sin que te guste el rock y el metal. No es lo mismo ni de lejos.

Y decimos que es su punto fuerte no solo por la ambientación dentro del lore. Se trata de música urbana y con ello prohibida por la élite, por lo que escucharla ya en sí misma es un acto de rebelión. Algo que encaja y colabora en la inmersión dentro del juego pues además las letras son fantásticas. Pero va mucho más allá. Ya que el ritmo de la música marca los ritmos del juego en muchas partes. Algunas más evidentes y otras menos. Sirviendo hasta de pista en cada nivel, especialmente en las persecuciones, dictándonos qué debemos hacer. Acentuando las emociones y apoyando el hilo narrativo de la historia.

Conclusiones de ANTRO

Nos encontramos ante una versión de Limbo conoce a 1984 de George Orwell. Una premisa sencilla a la par que profunda, donde encarnamos a aquel que debe liberarnos a todos en lo que parece una sencilla misión. Pero en el fondo es un juego totalmente musical, con lo bueno y lo malo que ello implica. Teniendo una duración aproximada de unas dos horitas en función de nuestra habilidad o si somos completistas.

*Versión analizada: Xbox Series X

Lo mejor

• La historia te atrapa rápido. Nada como una misión de llegar del punto A al punto B
• El trabajazo de la música en las persecuciones, donde cada nota y acorde encaja con nuestras acciones
• Una aventura intensa pero corta, con una rápida rejugabilidad para buscar logros, o no

Lo peor

• Una idea bastante fresca, pero que tampoco aporta nada nuevo al género
• Si no eres fan del rap y la música electrónica, se pierde gran parte de la adrenalina

70/100