El Real Valladolid cierra su oficina en Madrid

Tras dos meses desde el desembarco de Ignite y Ben Oldman en Valladolid, continúa con la reestructuración de su organigrama y su plantilla de empleados, algo que la copropiedad ha ido realizando poco a poco durante estas primeras semanas. Tras llegar el inicio del mes de septiembre, la nueva propiedad ha tomado decisiones sobre el personal no deportivo del Pucela que trabajaba en el club durante los últimos años.

Como ha podido saber ElDesmarque, el Real Valladolid ha cerrado su oficina de Madrid ubicada en la Calle Serrano número seis, sitio que se creó con la llegada de Ronaldo Nazário da Lima a la entidad hace ya más de seis años, y que se llevó a cabo por comodidad del anterior presidente y de algunos empleados pertenecientes al Club para comandar las operaciones a realizar desde la capital española.

Esto da comienzo a una serie de despidos de personal no deportivo que se van a extender a las oficinas del Estadio José Zorrilla. La nueva propiedad considera que la estructura está “sobredimensionada” y busca viabilidad a corto y largo plazo con un reajuste relevante en las oficinas tanto del feudo blanquivioleta como en esa oficina en Madrid que quedará cerrada, aunque desde la nueva propiedad se ha intentado reducir todo lo posible esta cifra de despidos, que trata de más de una decena de personas que dejarán de pertenecer a la entidad. 

De hecho, una de las personas que ha sido despedida de su cargo es Ignacio Oruézabal, el que era Director del Área de Desarrollo y de Negocio del Club pucelano. Tanto es así, que la mayoría de las personas que salen de la disciplina blanquivioleta son de ese departamento al que pertenecía Oruézabal.