Hay que pellizcarse varias veces para creer el precio del Toyota más atrevido

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El bZ4x tiene un precio irresistible
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El Toyota bZ4X representa una de las propuestas más audaces de la marca japonesa en su salto hacia la electrificación total. Este SUV 100 % eléctrico se desmarca del resto de la gama por su diseño rompedor, su lenguaje visual inédito y una presencia que marca distancia con el conservadurismo habitual de la firma. Lo que sorprende ahora es su precio: a pesar de su imagen futurista y su tecnología avanzada, el modelo ha reducido su tarifa de entrada, situándose en una franja más competitiva de lo esperado.
Con un precio de acceso que ronda los 46.900 euros, el bZ4X se posiciona dentro de un segmento donde es habitual encontrar cifras notablemente superiores. Lo llamativo en este caso es que el modelo no ha sido concebido como una versión recortada o simplificada. Al contrario, mantiene una configuración completa tanto en diseño como en tecnología, ofreciendo al conductor una experiencia acorde a los estándares actuales de los eléctricos de gama media-alta.

El diseño exterior es uno de sus mayores argumentos: líneas tensas, pasos de rueda marcados, proporciones robustas y una parrilla cerrada que refuerza su carácter eléctrico. Los detalles estéticos están pensados para ofrecer una imagen avanzada sin perder funcionalidad. La silueta, con cierto aire coupé, se combina con una buena altura libre al suelo, lo que le permite adoptar una postura de SUV sin sacrificar eficiencia aerodinámica.
Un eléctrico convincente de Toyota con precio inesperado
En el apartado mecánico, el bZ4X ofrece versiones con tracción delantera o total, con autonomías ajustadas a distintos perfiles de usuario. La conducción es silenciosa, fluida y orientada al confort, pero sin renunciar a cierta agilidad en carretera. Además, su batería de nueva generación mejora la eficiencia energética y permite recorridos amplios con una sola carga.
El interior mantiene la apuesta tecnológica, con pantallas amplias, mandos bien integrados y un diseño minimalista. El espacio disponible es generoso tanto en plazas delanteras como traseras, y el maletero ofrece una capacidad adecuada para el uso familiar. Todo el conjunto transmite la sensación de estar ante un producto bien resuelto, no solo visualmente atractivo, sino también funcional.
Por todo ello, el Toyota bZ4X no solo es el modelo más atrevido de la marca en términos de diseño, sino que ahora también se presenta como uno de los más sorprendentes en relación precio-prestaciones. Una combinación que, sin duda, lo hace destacar dentro del panorama eléctrico actual.