Una psicóloga, sobre la necesidad de consumir en el Black Friday: "Está diseñado para maximizar la urgencia"
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Al entender el Black Friday como un fenómeno que ocurre una vez al año, "dispara el comportamiento impulsivo"
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Si ya de por sí la temporada de 'rebajas' incita a comprar de forma compulsiva a muchas personas, el Black Friday aún más. Desde hace aproximadamente una década, el Viernes Negro -entendido como el día con descuentos que marca el inicio de las compras navideñas tras Acción de Gracias- se ha convertido en una fecha señalada del calendario de nuestro país y de muchos otros.
Esta necesidad, incluso a veces urgente, que genera el Black Friday tiene una explicación y nos la ha detallado en ElDesmarque la neuropsicóloga clínica, Alba García. "Los descuentos activan circuitos cerebrales relacionados con el sistema de recompensa, produciendo una sensación de gratificación anticipada", comienza diciendo, de acuerdo a las conclusiones de un estudio en la revista 'Neuron'.
Además, el término 'rebajas' "activa en muchas personas un sesgo de oportunidad, es decir, la idea de que hay una ventana limitada para obtener un beneficio", al mismo tiempo que "dispara el sesgo de escasez", añade la misma.
El Black Friday "dispara el comportamiento impulsivo"
Sin duda, la profesional explica que el Viernes Negro "es un contexto diseñado para maximizar la urgencia, la escasez y la recompensa inmediata, tres factores que potencian el consumo impulsivo".
Asimismo, que las campañas utilicen mensajes como "solo hoy", "últimas unidades" o "descuento por tiempo limitado", "dispara el comportamiento impulsivo". Por otro lado, "ver a muchas personas comprando al mismo tiempo genera un efecto rebaño". Son varias las explicaciones psicológicas que hay tras este fenómeno:
- El FOMO, con el que "las personas temen perder una oportunidad, muy relacionado con la ansiedad social y el refuerzo inmediato".
- El sesgo de escasez y urgencia, al percibir que el Black Friday ocurre solo una vez al año.
- La recompensa emocional que "activa neurotransmisores relacionados con el placer, como dopamina" hasta el punto de que para algunas personas "comprar funciona como regulación emocional".
- La ilusión de ahorro, porque, aunque no necesitemos el producto, "los descuentos generan una sensación de ganancia".
Personas más vulnerables al Black Friday
Si bien cualquier persona puede sentir esta necesidad de comprar algo durante el Black Friday, los estudios muestran que hay grupos de personas más vulnerables que otros. Las "personas con ansiedad, estrés o baja regulación emocional" son uno de estos grupos, pues "tienden a usar las compras como forma de escape o alivio".
En esta misma línea, las compras, para aquellos con baja autoestima o necesidad de aprobación social, "funcionan como una vía para reforzar identidad o estatus".
La gente con impulsividad elevada también es vulnerable, así como los "jóvenes y usuarios intensivos de redes sociales" porque al estar expuestos constantemente a "ofertas, influencers y marketing digital, aumenta el FOMO y la urgencia".