Los siete pecados capitales del Sevilla en el derbi ante el Betis

El Sevilla FC sucumbió este domingo de la peor manera en el derbi sevillano, perdiendo por segunda vez consecutiva ante el Real Betis Balompié por primera vez en tres décadas. Ejemplo claro y meridiano de la tremenda crisis que sufre el club en todos los aspectos, desde lo identitario a lo económico, que se refleja en el terreno de juego desde hace ya cuatro temporadas, con la única luz de la UEFA Europa League lograda por José Luis Mendilibar en Budapest justo antes de la salida de Monchi.

El Betis fue mejor, mucho mejor, que el Sevilla, sin necesidad de apretar el acelerador y llegando al Ramón Sánchez-Pizjuán con numerosas e importantísimas bajas. En ElDesmarque analizamos los siete pecados capitales del Sevilla en el derbi

Intensidad en la primera parte, falta de calidad

La única manera de que el Sevilla pudiera igualar al Betis era metiéndole intensidad al partido, algo que hizo bastante bien en la primera parte. Sin embargo, la acuciante falta de calidad es desesperante, con pases difíciles errados y pases muy fáciles también fallados. Es un equipo casi incapaz de generar jugadas, pero bueno, al descanso llegó con un partido igualado. Algo era.

Error de Mendy

El fútbol es un deporte de errores, eso es más que sabido, pero no de regalos. Y el Sevilla es Papá Noel, los Reyes Magos, el Niño Jesús, el Tió catalán y lo que haga falta. Todos los partidos concede una jugada de gol por un error no forzado, y en el derbi el que ‘destrozó’ el partido fue Batista Mendy. Una jugada sin aparente peligro acabó en gol de Pablo Fornals porque el francés se lio. Tenía fácil solución, como dijo Almeyda, pasársela al portero.

Los cambios de Almeyda

Hay que ponerse en la piel de Almeyda, darse la vuelta y hacer recuento de lo que tiene en el banquillo. Casi nada. Pero también hay que exigirle cuando se equivoca, y con los cambios que hizo entre el primer y el segundo gol descosió al equipo y desquició a un grupo de jugadores con una fortaleza mental muy muybiri pobre. El segundo gol no vino por ahí, pero sí las múltiples opciones que tuvo el Betis de acabar goleando.

Error de Carmona

Ha pasado más desapercibido, pero el fallo de José Ángel Carmona que propició el segundo gol fue también grave. El canterano está siendo de lo poco potable del equipo, algo que significa mucho, pero su error es de principiante. Pablo García tenía la pelota sin opción de peligro alguna, perfilado hacia afuera, mirando la valla de publicidad. En esa situación inocua, el visueño le atropelló y generó una ocasión a balón parado. Gol de Altimira y partido finiquitado.

Una delantera que no genera

Nunca han sido Van Basten y Romario, pero Akor Adams e Isaac Romero cada vez dan peor sensación sobre el terreno de juego. El nigeriano es incapaz de utilizar su imponente físico para ayudar a su equipo. No se lleva una por arriba y vive en permanente fuera de juego cuando precisamente uno de sus fuertes es la potencia en la arrancada. Lo del lebrijano ya… Comenzaron LALIGA con tres y dos goles cada uno, pero desde el partido ante el FC Barcelona hace ya dos meses no han vuelto a ver puerta. Y casi no tienen ni ocasiones.

La desesperación de Isaac Romero

Isaac Romero ha sido protagonista en los últimos derbis, y siempre por aspectos negativos. Se lesionó en el primero, estuvo en el centro de la polémica de las banderas en el segundo y en el tercero fue intranscendente. En el cuarto fue expulsado por una entrada absurda a Valentín Gómez, encarnando la desesperación sevillista. Por cierto, de sus cinco derbis chicos solo ganó uno y nunca marcó.

El lanzamiento de objetos

Si el Sevilla en lo deportivo fue una calamidad este domingo, los hechos que obligaron a suspender el partido durante un cuarto de hora también son reflejo del momento que vive la sociedad. Se retrotrajo a tiempos muy oscuros, prácticamente olvidados, cuando empezaron a llover objetos sobre el terreno de juego y Munuera Montero no tuvo más remedio que aplicar el protocolo. Habrá sanción y seguramente cierre parcial. ¿No les recuerda a finales del Siglo XX e inicios del XXI?