Mercedes trabaja en un ‘mini Clase G’ cien por cien eléctrico

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Con autonomías de hasta 700 km, llegará en 2027
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Este mini todoterreno de Mercedes es una buena alternativa premium para la ciudad
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Mercedes acaba con uno de los problemas de los eléctricos con su nuevo CLA
Mercedes-Benz está desarrollando uno de los proyectos más interesantes de su gama eléctrica: un "baby Clase G", una versión más compacta del legendario todoterreno alemán. Este nuevo modelo, completamente eléctrico, verá la luz en 2027 y promete mantener el carácter robusto del original en un formato más accesible y urbano.
A pesar de su menor tamaño, el futuro mini Clase G conservará el espíritu aventurero del modelo original. Viene a ser una alternativa premium al Suzuki Jimny, pero en eléctrico. Estará construido sobre la avanzada plataforma MB.EA, una arquitectura que ya usan otros modelos electrificados como el GLC y el Clase C. Esta base permite incorporar una arquitectura de 800 voltios y alcanzar autonomías de hasta 700 kilómetros, dependiendo de la versión.

Mercedes trabaja en un mini todoterreno
El diseño mantendrá las líneas cuadradas y la silueta imponente que han hecho del Clase G un icono del 4x4. Sin embargo, el nuevo modelo apostará por un formato más compacto, ideal para entornos urbanos pero sin renunciar a las capacidades off-road. Tendrá un sistema de tracción total que simulará el bloqueo de diferenciales, clave para ofrecer un rendimiento sólido fuera del asfalto.
Con este movimiento, Mercedes busca atraer a un público más amplio, que tal vez no necesite un vehículo tan grande o caro como el Clase G, pero sí desea un SUV eléctrico con personalidad. El mini G llegará para ocupar ese nicho, combinando prestaciones, imagen y eficiencia en un solo producto.

Una alternativa premium al Suzuki Jimny
En el interior, se espera un habitáculo tecnológico y refinado, cargado de sistemas de asistencia a la conducción y conectividad avanzada. Aun así, se conservarán detalles de estilo que recuerden al mundo 4x4, reforzando su identidad como heredero del icónico todoterreno.
El precio estimado rondará los 83.000 euros, lo que lo posiciona por debajo del Clase G, pero claramente en un segmento premium. Será una opción interesante frente a rivales como el Ford Bronco o el Jeep Wrangler, aunque con el inconfundible pedigrí de Mercedes-Benz.