El proyecto de Citroën que muchos esperan que se haga realidad

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Citroën tiene en su mano una apuesta ganadora que no se atreve a poner en marcha
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Una resurrección muy esperada que, de momento, no se producirá
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Si no quieres un Dacia o un MG, este Citroën es la mejor alternativa
La historia reciente ha demostrado que lo nostálgico vende. El pasado siempre fue mejor, dicen muchos. Y algunas marcas de la industria del motor han tomado buena nota. Renault 5, el Fiat 500, el Opel Manta, Volkswagen ID.Buzz,… el mercado está lleno de ejemplos.
En esta línea, en varias ocasiones se ha deslizado la posibilidad de que Citroën recupere uno de sus modelos más icónicos: el 2 CV. Una idea que a muchos les parece genial y que ha generado un sinfín de reacciones positivas, pero que en la marca francesa siguen sin verlo claro.

Mientras marcas como Renault o FIAT ya han demostrado que el retorno de coches míticos puede ser un gran acierto comercial, en Citroën reina la indecisión. Pese a contar con una joya como el 2 CV, no ha concretado nada. El grupo Stellantis, al que pertenece, ya ha dejado pasar oportunidades similares. Un caso muy comentado fue el del Peugeot e-Legend, un prototipo espectacular que enamoró a miles, pero nunca se produjo. Esa decisión sigue siendo vista como una de las más incomprensibles de los últimos tiempos en el mundo del motor.
Una apuesta ganadora que en Citroën no acaban de ver clara
El propio Thierry Koskas, hasta hace poco CEO de Citroën, reconocía que no hay planes definidos para un nuevo 2 CV. Aunque no lo descartaba, advertía que un desarrollo así llevaría años, y que la marca debería ser extremadamente cuidadosa si decidiera embarcarse en esa aventura. Y es que de hacerlo, lo harían con todo. Es decir, con una gama con varios tipos de motorización, desde eléctricas hasta híbridas, con versiones asequibles y otras más prestacionales. Lo podrían hacer aprovechando la plataforma Smart Car que Citroën ya utiliza en el nuevo C3.
Esa arquitectura permite múltiples mecánicas, desde propulsores eléctricos hasta pequeños motores de gasolina, lo que haría del nuevo 2 CV un coche versátil y competitivo en Europa, donde el precio y la eficiencia mandan. Además, su diseño icónico lo convertiría en una propuesta única frente al aluvión de modelos asiáticos que empiezan a dominar el mercado.