Lexus acierta con su propuesta más barata: la versión ‘pija’ del Yaris Cross

El Lexus LBX se sitúa como el modelo más barato de la marca, pero mantiene un planteamiento premium que lo distingue dentro del segmento de los SUV urbanos. Comparte plataforma con el Toyota Yaris Cross, aunque Lexus ha trabajado a fondo en el diseño, el aislamiento y la calidad de acabados para que el resultado sea un producto con identidad propia y un posicionamiento superior.

El exterior destaca por una interpretación más refinada de los rasgos de la marca, con una parrilla compacta, ópticas LED de diseño afilado y proporciones equilibradas que transmiten robustez sin renunciar a la elegancia. Sus dimensiones contenidas lo hacen manejable en ciudad, mientras que los detalles de acabado subrayan su aspiración a ser una alternativa más distinguida frente a otros SUV del mismo tamaño.

Mecánica híbrida y enfoque refinado del Lexus LBX

El Lexus LBX emplea un sistema híbrido autorrecargable de 116 CV que combina un motor de gasolina con asistencia eléctrica, priorizando la eficiencia y la suavidad de marcha. Con consumos ajustados y la etiqueta ECO, se orienta claramente a un uso urbano, aunque mantiene un comportamiento sólido en carretera.

El habitáculo refleja el salto cualitativo respecto a su base Toyota. Materiales blandos al tacto, ajustes precisos y un diseño limpio dan lugar a un interior que transmite sensación de calidad. Dispone de instrumentación digital, pantalla multimedia de gran tamaño y múltiples asistentes a la conducción, acompañados de un nivel de insonorización superior al de la mayoría de los modelos de su segmento.

Por todo ello, el Lexus LBX logra una combinación poco habitual: ser el acceso más asequible a la gama de la marca sin renunciar a la imagen y al confort propios de un producto premium. Frente al Yaris Cross, del que hereda la base técnica, ofrece un salto en percepción, calidad y refinamiento que justifica su posición diferenciada.