Te dirán que está desactualizado, pero supera al Toyota Corolla en ventas y tiene de todo por mucho menos

-
El Seat Ibiza, una de las opciones más sólidas
-
La DGT obliga a los autónomos a equipar las furgonetas con sistemas de seguridad ADAS
El Seat Ibiza continúa siendo una de las opciones más sólidas del mercado español, a pesar de que su diseño y propuesta no hayan sufrido grandes transformaciones en los últimos años. Con 1.766 unidades matriculadas en agosto de 2025, el urbano de Martorell no solo mantiene su relevancia, sino que se sitúa por encima de modelos con mayor presencia mediática, como el Toyota Corolla. Este dato refuerza la idea de que su fórmula, basada en equilibrio y funcionalidad, sigue plenamente vigente.
No es ningún secreto que el Ibiza ha sabido posicionarse como una alternativa racional. Su gama mecánica, compuesta principalmente por motores de gasolina eficientes, responde con solvencia a las necesidades del día a día. Las versiones con microhibridación le permiten además acceder a la etiqueta ECO, lo que amplía su versatilidad en zonas urbanas. La oferta de potencia parte desde los 80 CV, con opciones de 95 y 110 CV en configuraciones de tres cilindros, asociadas a cajas manuales o automáticas, según versión.

En el plano tecnológico, el modelo incluye un equipamiento más que suficiente en las versiones intermedias y superiores. Pantalla táctil central, conectividad total con smartphones, climatizador, control de crucero y asistentes activos de seguridad forman parte de una dotación que cumple con las expectativas actuales. Lo destacable en este caso es que todo ello se ofrece por un precio notablemente inferior al de rivales con tecnología similar, pero una estrategia de mercado más ambiciosa.
Un veterano que sigue liderando frente al Toyota
El acumulado anual del Ibiza también lo sitúa en una posición destacada: es el cuarto coche más vendido en España en lo que va de año. Este rendimiento no es casual, sino el resultado de una trayectoria consolidada, una red de distribución eficaz y un coste de propiedad muy contenido. En comparación con modelos híbridos más recientes, el Ibiza ofrece una propuesta menos compleja, pero también más accesible y práctica.
Por otro lado, su fabricación nacional y la familiaridad que genera entre los conductores españoles refuerzan su atractivo. Llama especialmente la atención que, en un mercado dominado por SUV y vehículos híbridos como el Toyota, un utilitario clásico mantenga este nivel de ventas sin grandes campañas ni novedades. El Ibiza no necesita reinventarse para seguir siendo relevante: le basta con ofrecer lo justo al precio adecuado.