El Tesla Model 3 revienta el precio, y es literal, y se convierte en el segundo coche más vendido en España

Tesla ha logrado un hito inesperado en el mercado automovilístico español: el Model 3 ha escalado hasta la segunda posición del ranking de matriculaciones mensuales. Con 1.976 unidades vendidas en agosto de 2025, solo fue superado por el Dacia Sandero, líder habitual en este tipo de clasificaciones. Lo llamativo en este caso es que el eléctrico de la marca californiana partía desde la posición 38 en el acumulado anual, lo que resalta aún más la magnitud del salto.

Este resultado se explica en buena parte por el ajuste de precios que Tesla ha implementado recientemente. Con una tarifa base que arranca en los 40.970 euros y la posibilidad de aplicar descuentos combinados con ayudas públicas, el coste final se ha situado en un umbral competitivo frente a modelos térmicos tradicionales. Esta estrategia ha dado lugar a una demanda excepcional en un contexto de transición energética y creciente interés por la movilidad eléctrica.

El Model 3 no solo ofrece un diseño aerodinámico y una autonomía destacada, sino que además incorpora un sistema de propulsión eficiente que permite superar los 500 kilómetros con una sola carga. A esto se suma una red de recarga rápida consolidada y un proceso de compra directo y digitalizado, factores que han contribuido a agilizar las entregas y dinamizar las matriculaciones.

Un eléctrico premium de Tesla en lo más alto del mercado generalista

Frente a opciones como el Renault Clio, el Toyota C-HR o el Seat Ibiza, todos ellos con mayor volumen acumulado en el año, el Tesla Model 3 se ha impuesto en el corto plazo con una estrategia que rompe las barreras habituales del segmento. Cabe destacar que ha superado en matriculaciones mensuales a modelos tan consolidados como el Toyota Corolla, el MG ZS o el Volkswagen T-Roc, lo que refuerza su posición como actor clave en esta nueva fase del mercado.

Por todo ello, la presencia del Model 3 entre los más vendidos supone un giro significativo. Un coche eléctrico de gama media-alta compite ahora de forma directa con utilitarios generalistas en un entorno cada vez más receptivo a las alternativas cero emisiones. Este cambio de tendencia redefine las reglas de juego en uno de los mercados más tradicionales del continente.