“Eskerrik asko, aita!”

Compromiso, esfuerzo, sacrificio… Son valores en rojo y blanco encarnados por muchas familias que han contribuido a hacer realidad los sueños de sus hijas, las jugadoras del Athletic Club de Bilbao. Valores que se han mantenido intactos desde que las acompañaron a su primer entrenamiento como futbolistas hasta que hicieron historia ante 48.121 espectadores en San Mamés.

Valores compartidos por el club, las jugadoras, sus familias y la afición

La marca de cervezas San Miguel ha querido destacar la labor y el sacrificio de todos aquellos padres que han contribuido con su constancia a fortalecer la pasión por el fútbol de sus hijas y a que el equipo femenino del Athletic sea hoy una referencia en el mundo del deporte. Ha aprovechado la festividad del Día del Padre para dedicarles un vídeo de homenaje.

El vídeo está protagonizado por las jugadoras del Athletic Club Damaris Egurrola y Jone Ibáñez y sus aitas, y reconoce el trabajo de todos los padres que hicieron prevalecer la afición al fútbol y al club por encima de estereotipos y obstáculos.

En él, los padres echan la vista atrás para repasar con emoción la trayectoria de sus hijas, desde sus inicios como jugadoras hasta la fecha mágica del pasado 30 de enero, cuando San Mamés batió el récord de asistencia a un partido femenino.

Aquella eliminatoria de Copa no solo supuso un hito deportivo internacional sino que también permitió a ambos padres cumplir un sueño compartido: el de sus hijas, por poder jugar como rojiblancas en un San Mamés lleno de público.

Un sueño que Damaris y Jone pudieron hacer realidad gracias a la pasión, el compromiso y el esfuerzo de sus padres, y que se podrá repetir el domingo 31 de marzo. Ese día, San Mamés volverá a abrir sus puertas para acoger un partido del Athletic Club femenino y para engrandecer la historia del club rojiblanco y de sus protagonistas.

Será ante el Levante, en el marco de la jornada 26 de la Liga Iberdrola, y constituirá la 14ª ocasión en que las leonas juegan en La Catedral. Un partido cargado de simbolismo pero también muy importante desde el punto de vista deportivo: el Levante es un rival directo en la lucha por el tercer puesto de la clasificación.

“El partido ante el Levante va a ser una nueva oportunidad de dar una alegría a la afición después de todo el apoyo que nos ha prestado durante la temporada. Además, queremos aprovecharlo para quitarnos la espina que tenemos clavada desde el partido de Copa ante el Atlético de Madrid, en el que nos hubiera encantado dedicar una victoria a las miles de personas que vinieron a vernos a San Mamés”, asegura la centrocampista Jone Ibáñez.