El Celta naufraga en Balaídos: el cuarto peor local de LaLiga Santander
El Celta de Vigo volvió a perder en el estadio de Balaídos y suma ya ocho derrotas jugando jugando como local esta temporada. El equipo vigués es el cuarto peor conjunto cuando se trata de jugar en casa y sus números asustan: 19 puntos de 51 posibles. En 17 partidos el cuadro dirigido por Eduardo Coudet solo ha sumado cinco victorias y cuatro empates en su feudo. El Deportivo Alavés, último clasificado y completamente desahuciado con 25 puntos, suma los mismos puntos en Mendizorroza que el Celta en Balaídos. Solo Levante, Granada y Cádiz compiten peor como locales en LaLiga este curso.
El equipo del Chacho Coudet volvió a tropezar. Esta vez ante el Getafe, y solo unos días después de su buena actuación en San Mamés. El Celta es un equipo irregular, le cuesta encontrar continuidad, y aunque se vaya a salvar de forma holgada, su temporada deja un borrón importante: en casa es débil.
El Celta no compite igual como local que como visitante. Cuando juega fuera de casa tiene los octavos mejores números. 20 puntos en 16 partidos, mostrándose a un nivel altamente competitivo y anotando (15 goles) más de lo que encaja (14). Estos números se fraguaron en la primera vuelta ya que en la segunda los vigueses solo han ganado fuera de casa al Athletic Club en la jornada 32 de Liga en San Mamés.
Esos buenos números globales cambian de forma radical cuando se trata de jugar en Vigo. Hay 15 equipos por encima de los celestes y solo tres por detrás. Sus opciones europeas o, de estar cerca de la pelea, se han esfumado en casa. El Espanyol, club con el que comparte posición y puntos en LaLiga Santander, suma 12 puntos más como local. Tan solo Cádiz, Levante y Granada tienen peores registros cuando se trata de jugar en su propio estadio. El Alavés, con 19 puntos, comparte esos pésimos números.
El Celta arrastra sus problemas de local desde hace tiempo
Echando mano a las estadísticas, el Celta arrastra este problema desde hace varias campañas. Las obras en Balaídos, con su aforo reducido y la baja asistencia, no sirven de excusa para justificar o entender por qué los celestes se atascan cuando juegan ante su público. De seguir así, esta será la tercera temporada de forma consecutiva que el Celta tiene peores números en Vigo que fuera. Hay que remontarse a la temporada 2018/19 para ver a un buen local. Aquel año, en el que el Celta acabó decimoséptimo con 41 puntos, cuatro por encima de la salvación, el cuadro de Mohamed, Cardoso y Escribá logró 29 puntos en casa.
Los problemas en Balaídos empezaron la siguiente temporada, en la que el banquillo fue ocupado por el propio Fran Escribá y Óscar García. En la 2019/20, el Celta obtuvo 23 puntos, siendo el tercer peor local de la categoría. Una temporada más tarde, ya con Eduardo Coudet, los números fueron mucho mejores: 30 puntos y decimoprimera posición, aunque ese curso fue el noveno mejor visitante. Esta temporada se ha repetido la historia de hace dos campañas, el Celta pierde en casa lo que gana y fuera. Aunque le ha servido para tener una campaña tranquila, Coudet deberá mejorar esos números para poder dar un paso más el próximo año.
