Míchel agita el árbol

"Los jugadores saben que va a haber oportunidades para todos, y el que rinda seguirá jugando, sea quien sea", comentaba Míchel en la rueda de prensa previa al partido ante el Leganés. El técnico madrileño no se casa con nadie y quiere probar tanto en los entrenamientos como en los partidos a sus jugadores para optar por los que mejor estén con el objetivo de enderezar el rumbo y distanciarse de los puestos de descenso. Así, el entrenador no se ha cortado un pelo y ha agitado el árbol en los primeros dos partidos que ha dirigido, en los que ha utilizado ya a 18 jugadores blanquiazules. 

Ante el Alavés, Míchel apostó de inicio por Kameni, Rosales, Luis Hernández, Demichelis, Miguel Torres, Camacho, José Rodríguez, Chory Castro, Keko, Charles y Sandro. Luego movió el banquillo y tuvieron su oportunidad Juankar, que marcó el 1-1, Ontiveros y En-Nesyri. Es decir, en su debut como técnico malaguista usó 14 jugadores.
Al fin de semana siguiente, en Butarque, el madrileño hizo tres cambios en el once. Apostó por Juankar de inicio en el lateral izquierdo, dio la titularidad a Llorente en el centro de la defensa y colocó a Pablo (volvía tras sanción) por la derecha en detrimento de Keko. El central y el centrocampista se estrenaban con Míchel, al igual que lo hicieron posteriormente Jony y Duda, que saltaron al césped en la segunda mitad para intentar intentar lograr la victoria.
18 jugadores ha probado ya el nuevo técnico en apenas 180 minutos. Los primeros olvidados han sido Mikel Villanueva, Michael Santos Ricca y Peñaranda, que todavía no han disputado ni un minuto con Míchel a los mandos (los dos últimos no han entrado en ninguna convocatoria). Tampoco se ha estrenado Juanpi, renqueante de los problemas de pubis, ni Boyko, aunque la posición de portero es algo especial en este sentido, ni los lesionados de larga duración: Koné, Recio, Kuzmanovic.