"Sin hablar de ascenso, tenemos equipo para pelearlo"

La pregunta a Paco Herrera en la previa del partido ante el Girona FC era obligada. Una vez cerrado el mercado de fichajes, ¿cómo valora el técnico la plantilla del Real Valladolid?: "Estoy encantado; muy feliz. Tengo un equipo magnífico. En el mercado de invierno no debemos necesitar nadie. Sin hablar de ascenso, tenemos equipo para pelearlo". Y además, cuidando la economía: "Casi todo lo que ha venido lo ha hecho a unos precios que no son normales. Si no, no hubiera sido posible".

En los últimos días, se cerró el equipo con dos incorporaciones: "Teníamos la necesidad de un delantero. Si no venía, no pasaba nada, pero yo lo pedía. Con Drazic era suficiente. Teníamos dos jugadores por puesto". Pero, "apareció De Tomás en el último momento". Un futbolista que "conozco poco" y del que "me he buscado la vida para ver imágenes e informarme. Es un jugador suficiente para nosotros, con gol, que no participa mucho en el juego. Mi impresión es positiva". Herrera admite que "puede alternar con el filial pero, en principio, el que tiene la última palabra soy yo". Y "por lo porquito que he visto, es más facil que pueda estar con nosotros".

Cuenta con Guzmán

Otro de los temas del final de mercado era la de los descartes. Solamente faltaba Guzmán Casaseca por salir y, finalmente, no lo hizo. Esto ha provocado un cambio de discurso en el Club y en el míster: "Guzmán ya cuenta. El club me ha dicho que está a mi disposición. Conmigo, en Las Palmas hizo muy buena primera vuelta".
El caso de Renzo Zambrano es diferente. El jugador se ha entrenado con el Real Valladolid Promesas por la mañana: "Estará con nosotros, pero me preocupa que el filial ande justo en el medio del campo. El segundo equipo debe pelear por no descender y ha perdido a un jugador importante como Anuar". Aunque anunció que, la idea es que el venezolano "venga al partido de Copa en Zaragoza".

Repetirá once

El técnico quiere máxima intensidad ante el Girona. Un conjunto que "lleva con el mismo entrenador cuatro años" y que "cada vez es más fiable y más difícil; siempre con la misma idea de juego". Por eso, el extremeño se vio obligado a parar el entrenamiento porque notó que la plantilla no estaba con la tensión suficiente. Asi lo explicaba: "El equipo es muy alegre; me sorprende que haya tan buen rollo en tan poco tiempo. Llevado al extremo malo no es bueno y, cuando afecta al ejercicio, por ahí no paso. Ha sido un toque de atención sencillo".
Herrera no dará la convocatoria hasta minutos antes del partido frente los de Pablo Machín pero anunció cambios, aunque no de jugadores, sino de sistema: "Vamos a jugar con el mismo once", pero su "defensa de cinco, que es casi de tres, porque sus laterales actúan como dos extremos, me hacen planteármelo de otra manera. Eso me obliga a tomar ciertas decisiones". Por lo que todo hace indicar que variará el sistema.