Jesús Navas cuenta su momento más duro en el Sevilla: "Llegaba a casa llorando, pero no decía nada"
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El palaciego soñaba con seguir en activo, pero la cadera le impidió vivir con normalidad
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Una maldita lesión crónica de cadera obligó a colgar las botas a Jesús Navas, quien casi un año después de su retirada aún sigue echando en falta el día a día. El duende de Los Palacios, leyenda y eterno capitán del Sevilla FC, fantaseaba con seguir en activo pasados los 40 años, pero esos problemas -que germinaron hace casi cinco años- le instaron a decir basta. Ahora ve el fútbol desde la distancia, aunque de vez en cuando se deje ver por la ciudad deportiva, y abraza una nueva ilusión. La del ciclismo, opción que barruntaba desde hace tiempo, y que le ha reencontrado con el deporte.
Con motivo del regreso de la selección española, Jesús Navas se acercó a visitar a varios de sus excompañeros. Un momento especial para el palaciego, que sigue echando de menos el día a día. "El cariño de todo el mundo es lo más bonito. Mi vida es el fútbol y para mí la selección es lo más grande. La cadera no daba para más y mi Sevilla y cada vez que me acerco se me mueve todo", argumentaba en su entrevista para Radio Sevilla.
Jesús Navas está a las puertas de cumplir 40 años, una cifra con la que aún pensaba seguir en activo, pero esos problemas de cadera le obligaron a decir basta. Por eso el exfutbolista explicó lo duro que fue el tramo final de su carrera: "Yo con la cadera llevo cuatro o cinco años. Llegaba a mi casa llorando después de los partidos, pero seguía entrenando y no decía nada. Ya al final era una locura, había días que no podía andar con mis hijos y eso sí que era un problema. Físicamente podía jugar dos o tres partidos seguidos, no tenía problema en ese sentido, pero era una pena. Me tocó la cadera. Estoy orgulloso de haberlo dado todo hasta el último día. Me entregué al máximo, eso es lo más importante".
La nueva vida de Jesús Navas
Ahora ha centrado su atención en el ciclismo, al que le dedica muchas horas semanalmente: "Me gusta, salgo con mi hermano y mis amigos. Llevo muchos años compitiendo y es lo que me gusta, poner mi cuerpo al límite. Empecé en plan tranquilos, porque era la primera que hacíamos, la Quebrantahuesos, pero fuimos a disfrutarla entre amigos. A mí me gusta competir, físicamente necesito seguir dándolo todo y en el ciclismo al no tener impacto no sufro las caderas. Disfruto mucho".
Jesús Navas también habló del derbi, del que espera sacar un resultado positivo: "Lo afrontamos como siempre, ya sabemos cómo son. Son partidos de no cometer errores. Hay que afrontarlos con intensidad, ya sabemos jugar este tipo de partidos. Estoy con mucha ilusión de que se haga un gran encuentro".
Por último, habló sobre Almeyda y su impacto en el equipo: "Es un entrenador idóneo, tiene intensidad que es muy importante, hace que lo den todo en el campo por el Sevilla y la afición. Transmite esas ideas, lleva poco tiempo y poco a poco saldrá lo mejor".