El 'silencioso' Moi Gómez

El Sporting de Gijón no jugó como se esperaba contra Osasuna, completando un partido muy pobre ante el colista de LaLiga Santander sobre el que pesaba un sinfín de bajas. Los rojiblancos no estuvieron acertados e incluso, por momentos, no proyectaron lo mucho que se jugaban. El empate fue insuficiente.

En ese capítulo destacó la actuación de Moi Gómez. Desaparecido todo el partido, sólo tuvo protagonismo cuando dio una patada a un rival sin el balón en juego en la primera parte. Por fortuna, vista la dirección de las decisiones del colegiado Gil Manzano, el futbolista alicantino sólo vio la amarilla.
Una tarjeta que le impedirá jugar, por sanción, el martes frente al Espanyol. Su baja, en cualquier caso, no merma el potencial del Sporting. Sobre todo debido al pobre rendimiento que Moi Gómez está ofreciendo. Cuenta, sin mayores méritos, con la confianza de Rubi. Y eso a pesar de su intermitencia y capacidad de aislamiento. En Pamplona, sorprendentemente, jugó los 90 minutos. Para el técnico estuvo peor Carmona, a quien al menos se le vio sobre el terreno de juego.
También sorprendió el descarte de Nacho Cases. El canterano vio el partido desde la grada. Su compromiso con el equipo está fuera de toda duda. También se da por hecho la implicación del resto de sus compañeros, aunque varios de ellos por sus características no sepan demostrarlo. Es el caso del 'silencioso' Moi Gómez.