Pepelu habla en nombre del valencianismo: "Queremos jugar en grandes estadios"

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"Hemos trabajado para corregir cosas del año pasado y estamos convencidos de que será un buen partido"
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Mientras la afición del Valencia agotó este miércoles en cinco horas las 290 entradas disponibles para el partido contra el Barcelona que se disputará este domingo en el Estadio Johan Cruyff, la plantilla estaba de comida y de conjura para afrontar el partido con la moral por las nubes. Finalmente, este miércoles el Barcelona comunicó al Valencia que dispondría de 290 entradas a 30 euros, el precio que se fija habitualmente en la iniciativa de LaLiga para favorecer los desplazamientos de las aficiones, y en cinco horas se vendieron todas, cosa que fue recibido con cierto alivio por la plantilla que, no obstante, sigue mosca con el escenario del partido. Pepelu hizo de portavoz.

A la salida, uno de los capitanes, Pepelu, ha atendido a los medios presentes, mostraba el sentir del equipo: "Son cosas que la Liga dice, nos adaptamos aunque sabiendo que queremos jugar en grandes estadios. Al final podemos hacer poco, a jugar el partido y a ganarlo", explicaba tal y como captaron las cámaras de À Punt
Pepelu: "Hemos trabajado para corregir cosas del año pasado y estamos convencidos de que será un buen partido"
"Estamos preparados y a ver si sacamos un buen resultado. Hemos trabajado para corregir cosas del año pasado y estamos convencidos de que será un buen partido", completaba Pepelu mientras se dirigía al coche. Cabe recordar que en el ágape estuvo el equipo al completo. ya con Mouctar Diakhaby, el último de los internacionales en reincorporarse al trabajo, para irse de comida. No faltó tampoco el cuerpo técnico, el director deportivo, Miguel Ángel Corona, y Jaume Doménech, un futbolista muy querido en el vestuario que acaba de anunciar su retirada pero que, hasta hace unos meses, era uno más del equipo.
Carlos Corberán y Gayà, al salir, lo único que se atrevieron a decir que "toca seguir trabajando", en el caso del entrenador, y que están con ganas de cambiar lo que sucedió el año pasado contra el Barcelona, en el caso de Gayà.