La difícil tarea del showrunner en el universo The Walking Dead

Desde que se estrenó la segunda temporada de The Walking Dead (2010-), allá por octubre de 2011, la noticia de la salida de la serie del creador y showrunner Frank Darabont fue recibida con sorpresa, ya que la primera temporada había sido una ideal mezcla de éxito creativo y de público, y se confiaba en la capacidad del prestigioso Darabont para poder continuar en esa ruta. Pero una pléyade de desencuentros entre Darabont y AMC, con ambas partes exaltando sus sentimientos y actualmente en los tribunales, llevó a la salida del nominado al Oscar, que fue sustituido por Glen Mazzara.

Mazzara capitaneó lo que quedaba de la divisoria segunda temporada y reflotó la calidad de la serie en la tercera, anunciando también su salida tras esa tanda. Fue sustituido a su vez por Scott M. Gimple, que ha llevado The Walking Dead hasta la actualidad, y dejará su rol de showrunner vacante de cara a la novena temporada, donde tomará el mando Angela Kang. Gimple, claramente hombre de confianza de AMC, pasará a ser el supervisor creativo del universo The Walking Dead, ya que también estará involucrado en Fear the Walking Dead (2015-), que también estrena showrunners con la pareja creativa Andrew Chambliss y Ian Goldberg, tras la salida del co-creador Dave Erickson.

Tantos abandonos y desencuentros no pueden ser casualidad, y aquí es donde comienza la parte "de opinión" de este escrito. La creciente colección de declaraciones y silencios de los involucrados en toda esta cuestión hace pensar, sin lugar a duda, en que ser el showrunner de una serie de este universo, del que ya se planea un nuevo spin-off, es difícil. Sin mayor prueba que la intuición, creo que se puede argumentar que AMC está muy implicada en las decisiones creativas que se toma en las series, y que eso ha llevado a tres personas a abandonar su cargo por no poder seguir trabajando en esas condiciones.

¿Es casualidad que tras la salida de Erickson de Fear the Walking Dead la serie introduzca a Morgan y avance dos años en el tiempo? ¿Es casualidad que cada X tiempo Gimple decida dar un giro impactante/mortal a las tramas de The Walking Dead a pesar de que el reparto manifieste su desacuerdo en público? ¿Es casualidad que ya esté prometiendo a los fans que la llegada de Kang a la serie la llevará al tono de la tercera y cuarta temporada, las más populares? Detrás de cada una de estas decisiones se puede intuir la desesperanza de una empresa que ve como sus audiencias decaen y los fans son cada vez más críticos, y que trata de arreglar la situación. ¿Lo logra? La opinión del arriba firmante es que no.