La Voz necesita a Melendi
Sandoval trabaja tranquilo. Es un poco rencoroso en la derrota, no le gusta perder, pero muestra su lado más cariñoso cuando hay triunfos. El de Humanes es el Número 1 si las cosas vienen bien dadas. Se puede decir que su alegría se contagia, su sonrisa transmite buen rollo. No apunta matrículas, no es revanchista. Y eso que tiene motivos para serlo en una ciudad que cuestiona sus métodos hasta cuando estos funcionan.
Los defensores del "aquí lo único que importa es subir y da igual como se juegue" tienen que cambiarse de bando y tirar del clásico "este Sporting aburre" para poder cuestionar el inicio de liga obtenido por los rojiblancos. Ya no dan señales de vida los que no querían a Hugo Fraile ni los que ponían la cruz a Scepovic sin haberle visto jugar.
Intuyo que todos esos forman ahora parte de una Peña más que numerosa que se ha inscrito bajo el nombre de "No me gusta Garai y me paso la vida repitiéndolo". El ex del Córdoba no es Xavi Hernández pero eso ya lo sabíamos en Julio. Creo que se puede pedir a Nacho Cases en el 11 inicial sin desprestigiar a Garai día si y día también.
El Sporting necesita a Nacho Cases igual que La Voz necesita a Melendi. Si uno de los dos falta se puede obtener buena audiencia (cambien buena audiencia por tres puntos) pero la calidad del producto baja claramente. El problema es que Sandoval no se atreve a ponerle. Tras muchos meses sufriendo, por fin es feliz.
Su plan funciona, el equipo es fiable y la palabra ascenso ya no es una utopía. Y por eso no quiere cambiar ni el guión ni los actores. Y por eso nos conformamos con ganar sin jugar bien al fútbol. Pero un puesto de play off no puede tapar que el bueno de la plantilla no tenga sitio en el equipo. Porque el bueno, que es muy bueno, es suplente de un Sporting más físico que técnico. Porque al bueno, que se llama Nacho y se apellida Cases, le estamos esperando con los brazos abiertos para que el Sporting, que todavía sigue siendo Sporting, vuelva a ser de Gijón.
Muchos soñamos con un equipo basado en Mareo donde Guerrero sea más importante que Lekic y Juan Muñiz no tenga que irse para dejar hueco en la taquilla a Bustos, pero si al entrenador le exigen subir a Primera como única vía para el éxito es normal que a este le importe bastante poco el futuro de la cantera. Hace un año teníamos un entrenador que apostaba por formar jugadores y la paciencia de la grada duró menos que la versión española de 'Cheers'. Ahora que se apuesta por el corto plazo la gente no tiene prisa. Al menos el Sporting ameniza esta indecisión ganando partidos.