La historia de por qué Nayanesh Ayman aprendió a pelear muay thai: "Que nadie más le ponga una mano encima a mi madre"
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Ayanesh Ayman se prometió que no volverían a golpear a su madre
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El hispano-congoleño reconoce que le gustaba sentirse "fuerte"
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Carlos Coello, pionero en el muay thai
Los inicios de los boxeadores, como Emmanuel Reyes Pla o de los luchadores, como Ilia Topuria, está cargada de historias emotivas pero pocas como la de otro campeón español, Nayanesh Ayman. El peleador nacido en la República Democrática del Congo pero afincado en Alcorcón es doble campeón del mundo de muay thai con una carrera que empezó con un motivo muy emotivo a la vez que duro por su parte.
El luchador también conocido como 'Singtho', como así se apoda en Instagram, lo contó durante su participación en La Revuelta como uno de los invitados de este jueves: "Yo aprendí y empecé a practicar muay thai por una causa personal, para saber defender a mi madre, para que nadie más le ponga una mano encima. Por eso empecé en el deporte".
"Yo no quería ser peleador ni ser campeón. Yo simplemente quería saber defenderme y sentirme fuerte influenciado por Mohamed Ali. Ali era una persona muy fuerte a la que yo admiraba y yo quería ser fuerte como él para que nadie más ponga la mano encima a mi mamá", contó Nayanesh Ayman ante el aplauso de los presentes.
El dos veces campeón mundial nació en la República Democrática del Congo, de padre indio y madre, con la que se quedó cuando se separaron, congoleña. De niño tuvo una infancia dura y pasó por Francia y Bélgica hasta asentarse definitivamente en Alcorcón. De sus orígenes en Kinshasa sacó su grito de guerra, Bomayé (Mátalo), que hizo popular Mohamed Ali durante su mítico combate contra George Foreman en dicha ciudad en 1975.
Durante su estancia en el país galo, su madre sufrió maltrato y esto es lo que terminó de decantar al pequeño Ayman por los deportes de contacto. Quería sentirse fuerte y, tras empezar compaginando boxeo, kick boxing y muay thai, terminó escogiendo esta última, donde ha llegado al estrellato.
"Yo, cuando empezaba a practicar deportes de combate, a mí no me gustaba pelearme. Me daba miedo que me peguen. Es más, hasta que hice mi primer combate, mi entrenador me decía 'Tienes que pelear' y yo le decía que no", reconoció entre risas el luchador.
El curioso primer combate de Nayanesh Ayman
Nayanesh Ayman ha contado la anécdota de su primer combate, al que llegó engañado por su entrenador: "La primera vez que peleé, me llevaron y me engañaron. Me dijeron que era un combate de entrenamiento contra otro club y llegué allí y era un combate de verdad. Mi rival vino de vestuarios y preguntó quién era yo y me dijo 'Ah, ¿eres tú? Pues no te lo voy a poner fácil'. Yo le dije a mi entrenador: '¿Por qué me dice esto? ¿Qué le he hecho yo?'".
"Entonces, salí a pelear y, en el primer asalto, le rompí la nariz, me mandaron a la esquina y yo me preguntaba que qué estaba pasando, por qué le veía un médico. Le rompí la nariz y me dieron ganador, me levantaron la mano y yo me sentí fuerte. Dije 'Ala, soy fuerte'. Ya desde ahí, yo todas las semanas, con 16 años, era un pesado. Preguntando que cuándo peleaba. Quería sentirme fuerte otra vez", finalizó Ayman.
