El Éibar tenía previsto demoler la tribuna oeste en noviembre

La gran victoria del Sevilla FC ante el SD Éibar en Ipurúa quedó empañada en parte por el accidente que sufrieron muchos de los sevillistas desplazados a tierras guipuzcoanas, debido al derrumbe de una de las vallas de seguridad de la tribuna oeste del campo eibarrés, mientras celebraban el segundo tanto de su equipo, el primero de Éver Banega.

En el club armero han saltado las alarmas, pues se trata de la única grada que aún no ha sido remodelada desde que ascendió a Primera división. La idea es que las obras en esa zona, con demolición incluida,se iniciaran en noviembre, después del partido ante el Real Madrid que se disputará el último fin de semana de ese mes, pero lo sucedido ante el Sevilla podría precipitar la ejecución de éstas.

Según apunta el Diario Vasco, el Éibar ya ha solicitado la redacción de un informe técnico que determine las causas que provocaron la caída, y espera a las conclusiones de los técnicos de LaLiga Santander, que ya habían inspeccionado las instalaciones en su día.

Así, tras el susto durante el partido ante el Sevilla, el consejo de administración de la entidad vasca valora ahora qué hacer con esa grada, aunque lo normal es que la demolición se produzca después del partido ante el equipo madridista, ya que es uno de los que más demanda generan para cualquier club.

14 heridos en Éibar

Tras el encuentro ante el Éibar, y después del susto, el propio Sevilla informó de lo sucedido, publicando en sus medios oficiales que en total habían sido 14 los heridos, de los cuales 10 fueron trasladados al Hospital de Mendaro, con diferentes lesiones, las más graves una fisura en el escafoide de la mano derecha y una fisura en la meseta tibial. Ya el domingo todos habían sido dados de alta.

En el equipo, con el capitán Jesús Navas a la cabeza, dedicaron la importante victoria en Ipurúa a todos los heridos.