[Opinión] La 3T de Outlander ha llegado a su fin

Una temporada más llega a su fin, y ya van tres. Outlander estrenó su tercera temporada el pasado 10 de septiembre con 1.49 millones de espectadores, cerrándola hace dos días con una ligera bajada a 1.43 millones, unas cifras que no están para nada mal y que mejoran las de las temporadas pasadas. La serie que adapta la saga de libros de Diana Gabaldon ha vuelto a lucirse.

Por supuesto, esto es una opinión personal y quizás algunos de vosotros no estaréis de acuerdo conmigo, pero me ha parecido una temporada muy bien orquestada, llena de contrastes visuales y de localizaciones, de momentos de tensión y de alivio, de amor y drama. Se agradece que no haya habido parón de meses entre una mitad y otra de la temporada y que hayamos podido verlos semana tras semana.

Hemos podido conocer nuevas facetas de los personajes; facetas creadas por el paso del tiempo y las "heridas de guerra". Nuestros protagonistas, Claire (Caitriona Balfe) y Jamie (Sam Heughan) han tenido que aprender a vivir el uno sin el otro durante 20 años y eso les ha pasado factura. Claire, por su parte, ha tenido que cuidar de la hija de ambos (Brianna, interpretada por Sophie Skelton) y labrarse una vida de médico en una sociedad más machista y patriarcal que la vivida 200 años atrás, mientras que Jamie se ha enfrentado a una viva de ermitaño a escondidas de la ley y también a la propia cárcel hasta poder re-hacer su vida.

Las luces y sombras de la superación de la pérdida y la distancia han sido magníficos pues no solo los veíamos en ellos, sino también en nuestros propios puntos de vista a la hora de analizar las situaciones de los personajes. Era un continuo "¿cómo puede estar con otro?" versus "debería pasar página".

Las dos partes en la que se divide la temporada están perfectamente señaladas bajo el reencuentro de los dos tortolitos, uno de los momentos más esperados por los fans y que no defraudó. Una primera mitad marcada por la guerra, la huida (en todos los sentidos), la superación, el dolor, los nuevos hábitos, nuevas relaciones, odio y frustración. No quiero olvidarme de mencionar a algunos de los personajes más importantes de esta primera tanda de episodios: Frank Randall (Tobias Menzies), Joe Abernathy (Will Johnson), Jenny Fraser (Laura Donnelly), Roger MacKenzie (Richard Rankin) y muy especialmente Lord John Grey (David Berry), quién será una continua sorpresa a lo largo de la temporada.

La segunda mitad de temporada comienza llena de emoción, esperanza, alivio y amor. Tras 20 años Jamie y Claire se reencuentran y aunque parecen algo torpes al tener que demostrar otra vez sus sentimientos y habituarse a las nuevas vidas y madurez en personalidad de ambos, vuelven a encontrar el camino hacia sus corazones. Suena cursi, pero es que es así. No obstante, la tranquilidad se ve truncada por el secuestro del sobrino de Jamie (El Joven Ian interpretado por John Bell), la cual provocará el viaje de los protagonistas desde Escocia hasta El Caribe.

La tercera temporada de Outlander nos ha tenido siempre con el corazón en un puño pues no veíamos el momento de ver a Jamie y Claire juntos, sin necesidad de separarse. Acontecimientos inesperados como una enfermedad, catástrofes meteorológicas o la vuelta de Geillis Duncan (Lotte Verbeek) nos han hecho dudar en más de una ocasión de que realmente existiera la tranquilidad para esta pareja.

Si quisiera relatar todos y cada uno de los acontecimientos de esta temporada necesitaría que me leyérais durante tres o cuatro horas, no obstante no quiero dejar esta reseña sin comentar lo mucho que me gusta Cesar Domboy como Fergus adulto, volver a mencionar la importante figura de Lord John y como a pesar de así estar feliz, haber necesitado algo más en los últimos minutos de temporada.. Es el único fallo que estoy dispuesta a sacarle, la falta de un gran cliffhanger que enganche con la cuarta, sin embargo tampoco nos lo dieron al final de la primera y la segunda comenzó más fortísima.

Outlander vuelve a demostrar que sí, es una serie de género romántico pero también una serie con guerras, política, crítica social y elementos históricos. Esta tercera temporada ha sido fresca y distinta de la anterior, al igual que esta lo fue la primera. Estos segundos de la cuarta temporada emitidos en exclusiva por la cadena nos avanza que Jamie y Claire intentarán instaurar una nueva vida en América, en mitad de la Revolución de las Trece Colonias.

¡Por cierto! Ya se habla de renovación por una quinta temporada.

Outlander y los Globos de Oro

Seré breve. Outlander se abrió paso con una nominación a "mejor serie de drama" en 2016 en los Globos de Oro, y así lo hizo también Caitriona Balfe en 2016 y 2017 como "mejor actriz de drama". Tobias Menzies también estuvo nominado en 2016 por su papel de Frank/Jack Randall.

En las nominaciones de este año, Caitriona ha vuelto a abrirse paso entre las decenas de actrices de televisión y aunque no la veo como una posible ganadora, me gustaría aplaudirle. Su actuación durante estos 3 años ha sido impecable y lo merece. Ojalá me equivoque y se lleve la estatuilla este año.

¿Sam Quien? Dirán los críticos de televisión encargados de decidir los nominados a Los Globos de Oro. Un año más la actuación de Heughan ha sido infravalorada, aunque si no la tuvieron en cuenta en la primera temporada no se por qué iba a esperarla ahora. Sam nos regaló una de las actuaciones más potentes del año en 2015 y fue ninguneado. ¿Por qué, señores, por qué?

Yo atribuyo este fenómeno a la infravaloración de los guapos. Parece ser que si un actor goza de buen aspecto, no, si un actor levanta en parte por su aspecto, es que todo su talento reside en una cara bonita o en un pectorales trabajados. Lo mismo pasa en infinitas ocasiones con actrices. Parece que algunos críticos se sienten acomplejados de que haya seres humanos que lo tengan todo, yo también señores, pero hay que reconocer las cosas.

Pero bueno, de qué me voy a quejar si igualmente la serie esta infravalorada por no ser una HBO o una Netflix de turno.