Fernando Alonso, Aston Martin y el “caso Monza”: Mike Krack pide calma y datos sobre el incidente

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Mike Krack, team manager de Aston Martin, busca datos sobre el accidente de Fernando Alonso en Monza
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Fernando Alonso busca explicaciones al abandono y su frustración con la mala suerte aumenta: "Por desgracia me estoy acostumbrando"
La retirada de Fernando Alonso en Monza, uno de los circuitos el cual todos quieren conquistar, vuele a poner el foco en la fiabilidad del AMR25, y en general, del equipo verde en el campeonato. Aston Martin ha iniciado, desde el mismo momento en el que el coche del asturiano regresó al garaje, un análisis en profundidad para conocer los detalles y el origen de la rotura de la suspensión delantera que dejó al piloto español sin puntos una carrera más cuando había ejecutado a la perfección un plan de carrera pensado para defenderse en recta.
“Todavía no lo sabemos, tenemos que analizarlo”, admitió Mike Krack tras la carrera, añadiendo que las piezas viajarían a la fábrica para su evaluación. El incidente llegó al pasar por un piano en la vuelta 25, justo cuando Alonso tenía un gran ritmo y una posición privilegiada para maximizar su plan de mantener el DRS de Gabriel Bortoleto. Esta decisión del equipo se debía ante la constante persecución de los coches posteriores siendo mucho más rápidos en recta que Fernando. Él, así, podría mantener a raya al resto de competidores.
El golpe del coche con el piano no fue fortísimo, pero si suficiente para que la suspensión del AMR25 tuviera que decir adiós al GP de Italia. Los coches cada vez son más rápidos, pero a la vez más bajos, una de las señas de identidad de esta generación. Es por ello que vemos infinidad de accidentes de este tipo comparado con años atrás.

Sin soluciones ante la espera de Bakú
“Es fácil señalar al piloto, pero en estas situaciones hay que atenerse a los hechos”, añadió Krack ante los medios. Además, admitió que le comunicaron al instante el incidente de Alonso a su compañero de equipo, Lance Stroll, para advertirle del lugar donde había resultado malparado el español y así no terminar la carrera con ambos coches retirados.
El jefe de Aston Martin defendió los protocolos del equipo, ya que “para todos los equipos la seguridad es lo primero” y recalcó que no se reutilizan elementos de suspensión que comprometan la fiabilidad. El enfoque ahora es puramente técnico. “Esto es algo que tenemos que comprobar muy bien”, comunicó el luxemburgués.
A la pregunta sobre la “mala suerte”, Krack fue tajante: “Soy ingeniero”. Y sobre el rendimiento en Monza, huyó de complicaciones, “en la fórmula 1 no hay milagros” y dejó claro que, sin la avería, “podríamos haber terminado en los puntos”.
Preocupa lo que viene, Bakú, un circuito con largas rectas donde seguramente habrá coches mucho más rápido que ellos, con mayor velocidad punta y, por lo tanto, una estrategia similar a la de maximizar el DRS detrás de alguno de los competidores será más que útil como alternativa en busca de los puntos. Krack cerró con un deseo realista: “Crucemos los dedos”.