El Sevilla, los asados y los cambios de Almeyda

La derrota del Sevilla ante el Villarreal han traído las primeras críticas hacia Matías Almeyda. Unos inesperados cambios tienen la culpa, más allá de que su equipo sea bastante peor que el Villarreal. Pero una vez pasadas las horas, de haber dormido y despejado la mente, puedo llegar a entender algunos de los motivos de esos cambios. Y, con ello, resto de mucha culpa al entrenador del Sevilla a lo que pasó. Aquí traigo los asados del argentino.

Almeyda dio hace unos días una clase magistral ante los periodistas de cómo llevar a un grupo. Esos entrenamientos invisibles de los que hablaba Joaquín Caparrós y que tanta gracia hizo a mucha gente el otro día. Almeyda explicó lo que significan para él esas reuniones culinarias con la plantilla. Un entrenador, en este caso, no puede decir que quiere a todo el mundo si luego no lleva esas palabras al trabajo diario, a los partidos. Cómo va a decir a sus jugadores que todos juntos deben lograr los objetivos si luego juegan siempre los mismos. Por eso, primer motivo, entiendo los numerosos cambios en el once titular.

Y, repito, es normal y lógico que este Sevilla pierda contra este Villarreal. Juegue quien juegue. Es más, el hambre del equipo de Almeyda les hizo estar en el partido muchos minutos, porque al descanso pudo estar todo finiquitado. Muy bien Vlachodimos, por cierto. Gran fichaje.

Segundo motivo: como este Sevilla no tiene muchos jugadores de clase A (creo que ahora mismo nadie lo es), no puede Almeyda repetir alineación tres días después de un gran esfuerzo. Porque la principal característica del equipo es el físico y el físico da para lo que da. Otra cosa es que los más suplentes no estén al nivel de los más titulares. Eso es demérito del club, sobre todo de lo que ha llegado en los últimos años, y trabajo para el entrenador. No todos los equipos pueden hacer 8-9 cambios de un partido a otro y que apenas se note en el rendimiento.

Y el tercer motivo de los cambios (los realizados durante el partido): el entrenador está para adelantarse a lo que pueda ocurrir sobre el césped, no mover las piezas cuando algo negativo haya ocurrido. El Sevilla, tras unos minutos eléctricos en la segunda parte después del empate, empezó a pedir auxilio. Nianzou debe jugar porque es el mejor defensa del equipo. Si se lesiona tanto no es culpa de Almeyda. ¿Que por qué gastó los cambios en el minuto 70? Hay partidos que así lo requieren. Si deja alguno para el final y el Villarreal llega a marcar antes... Porque el Villarreal pudo haber marcado antes también.

Reflexión final: el Sevilla no pierde por irse al ataque con diez jugadores y dejar su defensa libre. Con 11, el Villarreal tuvo dos mano a mano con el portero, con los mismos espacios libres. El Sevilla pierde porque es peor equipo que el Villarreal, sin más. Almeyda tiene trabajo, sí, será criticado si no gana. Pero tiene una idea y, de momento, ha convencido a sus jugadores. Haya asado o no haya asado. Todos, digo todos, deben saber que tiene la opción. No sólo de boquilla, sino con hechos.