El nuevo modelo de Toyota es, para muchos, el más bonito de la marca
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286 CV de potencia y hasta 630 km de autonomía, pero no es esto lo que más te gustará
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Lamentablemente, no está previsto que llegue a Europa
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Es japonés como el Toyota Corolla Cross, pero tiene un precio mucho más interesante
Dado que Toyota ha enfocado su estrategia en una gama de motores híbridos autorrecargables HEV, cuando lanza un nuevo coche eléctrico no pasa desapercibido. No obstante, aunque se trata del caso que nos ocupa, no nos ha llamado tanto la atención que sea un eléctrico como su diseño. El fabricante japonés, tradicionalmente asociado a la sobriedad, ha sorprendido con un eléctrico que entra por los ojos. La mala noticia: no hay planes para que desembarque en Europa.
Desarrollado junto a FAW para el mercado chino, el Toyota bZ5 se desmarca del resto de la familia bZ con un planteamiento mucho más atractivo a nivel visual. Con líneas fluidas, silueta de estilo fastback y proporciones robustas, el modelo se posiciona en el segmento D y mide 4,78 metros de largo, con una distancia entre ejes de 2,88 metros. En términos de presencia, compite de tú a tú con pesos pesados como el Tesla Model Y.
Toyota refuerza su apuesta eléctrica con el bZ5
Estéticamente, el bZ5 logra algo poco habitual en Toyota: generar opinión unánime. Su frontal limpio, la caída del techo y los volúmenes bien equilibrados lo convierten, para muchos, en el modelo más bonito que ha fabricado la marca hasta la fecha. Un diseño pensado desde cero para gustar en China, pero con potencial global.
En el interior, el salto también es evidente. La estética es claramente minimalista, con un enorme panel central de 15,6 pulgadas, ausencia casi total de botones físicos y una atmósfera de tecnología avanzada. Además, incorpora sistemas de asistencia de conducción de última generación, apoyados por un sensor LiDAR en el techo y más de 30 funciones de ayuda a la conducción.
286 CV de potencia y hasta 630 km de autonomía
Bajo el capó, el enfoque es comedido pero eficaz. Se ofrece con un motor de 200 kW (268 CV) y baterías LFP de 65 o 74 kWh, capaces de homologar hasta 630 kilómetros de autonomía en ciclo CLTC. Lejos de buscar cifras extremas, el bZ5 apuesta por el equilibrio entre rendimiento, eficiencia y fiabilidad. Curiosamente, las baterías y el propulsor no son de Toyota, sino del gigante chino BYD, que también provee tecnología a otras marcas globales.