Toyota sigue teniendo una de las mejores compras ahora en España

El Toyota C-HR continúa consolidándose como uno de los SUV compactos más equilibrados del mercado español. Con un diseño rupturista y una apuesta decidida por la electrificación ligera, este modelo ha sabido mantenerse vigente frente a una competencia cada vez más numerosa. Su silueta tipo coupé, marcada por líneas angulosas y una zaga elevada, refuerza una identidad propia que lo diferencia en un segmento donde la imagen juega un papel clave.

La gama mecánica se basa íntegramente en versiones híbridas autorrecargables, lo que permite al C-HR ofrecer consumos ajustados sin necesidad de recarga externa. Las opciones disponibles combinan un motor de gasolina de 1.8 o 2.0 litros con un sistema eléctrico y una batería de pequeña capacidad. En conjunto, ofrecen potencias de entre 140 y 197 CV, gestionadas mediante una transmisión automática de tipo e-CVT que prioriza la suavidad de marcha. La respuesta es progresiva, con un comportamiento refinado tanto en ciudad como en carretera.

Llama especialmente la atención la calidad de presentación del interior. El salpicadero está orientado hacia el conductor, con materiales acolchados, mandos bien distribuidos y un sistema multimedia que integra funciones conectadas y pantallas de hasta 12,3 pulgadas según versión. El espacio es correcto para cuatro adultos, con unas plazas traseras más ajustadas en altura debido al diseño del techo. El maletero ofrece un volumen en torno a los 388 litros, suficiente para un uso cotidiano y viajes de corta duración.

El Toyota C-HR es sinónimo de eficiencia, diseño y valor de reventa

Por otro lado, el Toyota C-HR destaca por su eficiencia real en el consumo y por un equipamiento que, desde los niveles más básicos, incluye asistentes avanzados a la conducción, faros LED, climatizador automático y acceso sin llave. Todo ello refuerza su posicionamiento como vehículo completo, sin necesidad de recurrir a acabados superiores para obtener una dotación equilibrada.

Con precios que parten desde los poco más de 30.000 euros, se sitúa en una franja competitiva para un SUV híbrido de su categoría. Lo destacable en este caso es que combina una mecánica contrastada, un diseño muy personal y un valor residual elevado, lo que lo convierte en una de las opciones más sensatas para quienes buscan un modelo eficiente, fiable y con personalidad propia en el panorama actual.