Mazda CX-5 2026: más grande, tecnológico y seguro

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La tercera generación del SUV japonés crece en tamaño, confort y equipamiento sin perder su esencia deportiva
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Con sistema híbrido ligero, nueva identidad visual y avanzada conectividad, llegará en diciembre desde 35.200 euros
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Este icónico deportivo regresará con un peso como el Mazda MX-5 y con 400 CV
La tercera generación del Mazda CX-5 debutará en diciembre con una propuesta más completa, refinada y tecnológica, consolidándose como uno de los modelos más equilibrados del segmento.
Este SUV mantiene su esencia desde su lanzamiento en 2012, y ahora crece en todos los sentidos: diseño, espacio, motorización, tecnología y seguridad.
Con más de 4,5 millones de unidades vendidas a nivel mundial, el CX-5 se ha convertido en un pilar de la marca japonesa. La versión 2026 apuesta por un diseño más musculado y una mayor presencia visual, con proporciones agrandadas: 4.690 mm de largo (115 mm más que su antecesor), 1.860 mm de ancho y 1.695 mm de alto. Además de ser más espacioso, ofrece un maletero con 583 litros, ampliables gracias a los asientos traseros abatibles en formato 40:20:40 y un acceso más cómodo gracias a puertas traseras más amplias y portón más bajo.
Estéticamente, el CX-5 mantiene su lenguaje “Kodo” con mejoras notables: una parrilla frontal más robusta, ópticas estilizadas, nuevos colores exteriores y llantas de 17 o 19 pulgadas. También se actualiza el logotipo de Mazda, que pasa a ser plano y bidimensional, acompañado de una renovada paleta cromática para la marca.
Tecnología interior y eficiencia híbrida
En el interior, el nuevo CX-5 destaca por su refinamiento. El salpicadero horizontal y la pantalla central (de hasta 15,6 pulgadas según versión) se combinan con materiales de alta calidad y un diseño funcional. La iluminación ambiental, la consola central rediseñada y los acabados duraderos elevan la experiencia a bordo. La gama de tapicerías varía desde tela negra hasta piel natural y techo solar panorámico en las versiones superiores.
A nivel mecánico, el CX-5 incorpora un motor de gasolina 2.5 l. e-Skyactiv G de 141 CV con tecnología híbrida ligera (M Hybrid). Esta tecnología mejora la eficiencia mediante recuperación de energía y asistencia al motor. La tracción puede ser delantera o total, con una aceleración de 0 a 100 km/h en torno a los 10,5 segundos y velocidades máximas de hasta 187 km/h.
Mazda también ha trabajado en la dinámica: se han actualizado chasis, suspensión, dirección y neumáticos, para una conducción más cómoda y ágil, especialmente en carreteras europeas. Los asientos rediseñados mejoran la postura y reducen el cansancio.
El nuevo CX-5 integra el sistema de infoentretenimiento con Google Maps, Google Play y Gemini, el asistente de voz, ofreciendo una conectividad más natural e intuitiva. Además, la oferta de sonido incluye un sistema BOSE de 12 altavoces en versiones altas.
En cuanto a seguridad, este es el Mazda más avanzado hasta la fecha. Incorpora un completo paquete ADAS con sistemas como frenada de emergencia (SBS), control de ángulo muerto, detector de fatiga, aviso de salida involuntaria de carril, y asistencia de tráfico y crucero. El sistema de visión 360° y el Proactive Driver Assist elevan la asistencia al conductor, haciendo del CX-5 un referente en seguridad activa.
Disponible en cuatro versiones (Prime-Line, Centre-Line, Exclusive-Line y Homura), ya se puede reservar desde 35.200 euros. Su llegada a los concesionarios está prevista para diciembre.