Girona 3 - 3 Real Oviedo: David Carmo instala la locura total en Montilivi

Decía Luis Carrión en la previa del Girona-Real Oviedo que su equipo debía cargar más el área para acercarse a los tres puntos. Lo demostró apostando por una doble punta de inicio y tanto Fede Viñas como Salomón Rondón le dieron momentáneamente la razón. El uruguayo allanó el camino a la victoria azul en un encuentro y el venezolano parecía culminar el triunfo, pero los de Míchel lograron remontar el partido gracias a un certero Stuani. Y cuando todo parecía decidido... apareció David Carmo. Locura total.

El inicio del partido no invitaba al optimismo en clave azul. A los ocho minutos, David Carmo veía la cartulina amarilla y quedaba obligado a medir sus acciones defensivas durante más de ochenta. Tres minutos más tarde, Aarón Escandell realizó su ya habitual milagro evitando el gol de Joel Roca en una acción muy claro.

Fede Viñas impuso la ley del Oviedo en la primera mitad

Y a partir de ahí fue cuando el equipo de Luis Carrión acabó imponiendo su plan de partido. Fede Viñas comenzó a pisar más área rival y gracias a un cabezazo provocó un claro penalti por manos de Álex Moreno. El uruguayo se lo guisó... y también fue el encargado de anotar el lanzamiento desde los once metros.

El equipo de Míchel elevó su intensidad tras el 0-1, pero Escandell y los centrales se mantuvieron fuertes en la defensa del área. Al descanso, el Oviedo ganaba en Montilivi, pero quedaba lo más difícil.

David Carmo culmina la locura de Montilivi

Tras la reanudación, Carrión se vio obliga a agitar el árbol. Ovie Ejaria sufrió un percance muscular y el técnico carbayón dio entrada a Alberto Reina con el objetivo de seguir haciéndose fuerte en el centro del campo. Y a partir de ahí, el partido se volvió loco.

Colombatto puso un balón medido a Rondón y el ariete no desaprovechó la oportunidad. El venezolano, con un gran cabezazo, ampliaba la ventaja azul, aunque el Girona aún tenía cosas que decir en el partido.

Stuani, en una acción de pillo, le sacó un penalti a Leander Dendoncker y el capitán local no falló desde los once metros. Con 25 minutos por delante, el Oviedo quedaba obligado a ponerse el mono de trabajo. Y lo logró... hasta que Azzedine Ounahi confirmó la mejoría local con un zapatazo.

El Girona culminaría la remontada momentáneamente en una acción de delantero de Ounahi en la que picó Brekalo. Stuani condenaba al Oviedo desde los once metros, pero David Carmo completó la locura en Montilivi con un tanto postrero. Un partido de los que hacen afición.