La historia de María Antonia, la aficionada del Betis a la que su cardiólogo le 'quitó' el Benito Villamarín

"El Betis es más que una religión". Así de tajante, directa y sincera se muestra María Antonia, nuestra protagonista, ante las cámaras de ElDesmarque. Socia desde los 14 años, tuvo que ceder su asiento en el Benito Villamarín solo dos veces: la primera, por la enfermedad de su marido y la segunda por recomendación del cardiólogo.

Con muchos años en su voz y otros tantos en su experiencia. María Antonia comienza mandándole un mensaje a Isco Alarcón y acaba contándonos que "tuve que dejar de ir al Betis porque el cardiólogo me lo dijo. Me decía: ¿Dónde te quieres morir, en tu casa o en el campo?", comenta entre risas.

Apasionada verdiblanca, confiesa que contaba con el abono desde los 14 años, pero que una temporada dejó de ir por una enfermedad de su marido. "No le gustaba el fútbol, pero siempre me decía que me sacase el abono. Un año no me lo saqué y él me decía que fuese. Le dije que era porque estaba en Segunda, pero en realidad era porque no quería dejarle solo", recuerda.

"El estadio lo tengo a dos pasos, pero yo no iba a dejar solo a mi marido", añade antes de reconocer que le gustaría ver terminado el nuevo Benito Villamarín, pero que "a mi edad no lo sé, tengo muchos años y muchas cosas en el cuerpo".

Ahora lamenta la lesión de Isco Alarcón no sin antes recordar que "nosotros le queremos mucho, pero el año pasado teníamos llena la enfermería y mira como acabamos".

Como ella misma admite, entre risas, se pelea con los sevillistas "por el Betis", pero a buen seguro que todo el que la conoce la entiende y respeta. Una vida entera siguiendo a un mismo equipo, una vida entera animando a unos mismos colores.

"Viva el Betis manquepierda", dice despidiéndose antes de chivarnos que su vecina también es bética.