La anécdota de Jordi Sabaté Pons con los jugadores del Real Madrid
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Continua la lucha contra el ELA
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El Real Madrid volvió a demostrar su grandeza más allá del terreno de juego en la jornada 5 de LALIGA EA Sports. En el último partido ante el Espanyol en el Santiago Bernabéu, los blancos invitaron a Jordi Sabaté Pons, reconocido activista y referente en la lucha contra la ELA. Pons ha querido compartir con ElDesmarque sus sensaciones tras vivir esa experiencia tan especial en el feudo madridista y lo ha hecho, in situ, desde el RCDE Stadium, casa de su querido Espanyol.
Entre los presentes aquel día también estuvo un joven marroquí, superviviente del terremoto de 2023 en Marruecos, que perdió a toda su familia, para realizar el saque de honor. Un gesto que provocó la ovación de todo el estadio y que muestra el señorío del club madridista.
El mensaje de Jordi Sabaté
Este es el mensaje que el bueno de Jordi ha querido compartir con nosotros: “Hola guapos y guapas de ElDesmarque, hoy estoy en el estadio de mi maravilloso club, el Real Club Deportivo Espanyol. Acaba de empezar el partido y espero que ganemos”, nos contó Jordi con su habitual cercanía y buen humor.
Sobre su paso por el Santiago Bernabéu, Sabaté no se cortó elogiando la gestión del conjunto blanco: “El sábado fui invitado por el Real Madrid y mi experiencia fue fascinante. El trato por parte de todo el personal fue sobresaliente. Lo único malo es que perdimos, pero, aun así, fue algo increíble que jamás olvidaré”.
La anécdota con los jugadores del Real Madrid
Con su particular manera de tomarse la vida, Jordi quiso bromear incluso con su enfermedad: “Hubo una anécdota con Mbappé, Vinicius, el gran Xabi Alonso y con todos los jugadores. Yo quise levantarme para saludarles, pero no me reaccionaron las piernas… a día de hoy aún no sé la causa, jajajaja”. Este es el ejemplo de cómo tomarse la vida. Un chico con ELA, que transmite felicidad y ganas de vivir, con una sonrisa intacta y una mirada que habla por sí sola. Jordi, desde luego, debería ser un ejemplo para todos aquellos que se preocupan por lo más mínimo en el día a día.
El catalán, que convive con la ELA desde hace más de siete años, es un ejemplo de absolutamente todo. Fuerza y vitalidad. Siempre con una sonrisa, se ha convertido en una voz imprescindible para visibilizar la enfermedad, pero también en un símbolo de optimismo. “Besos y abrazos con mis pestañas a todo el equipo de ElDesmarque”, se despidió con su sello personal.