Vuelta a casa tras el tropiezo en Almería
El Real Zaragoza ha vuelto a casa. Después de la derrota en Almería y el entrenamiento posterior en las instalaciones del Málaga, el equipo aragonés ha comenzado a preparar el choque del próximo sábado frente al CD Lugo en la Ciudad Deportiva.
Primera sesión de la semana con la vista puesta en la visita del equipo lucense, pero todavía con la pesadumbre propia de haber vivido la primera derrota de la temporada. Pese a que el buen ambiente sigue siendo la nota dominante, se ha podido ver a algún jugador más afectado. Caso especial para Papu, sobre quien han caído las culpas del segundo gol del equipo andaluz y cuya imagen ha quedado lejos de la alegría habitual.
Sobre el césped, las miradas puestas en dos jugadores. Uno por su ausencia, como es James Igbekeme. El nigeriano se lesionó en Almería y no estará con el equipo durante las próximas semanas. El otro, uno de sus posibles sustitutos: Íñigo Eguaras. El centrocampista navarro sigue acumulando sesiones de trabajo y lo ha hecho con aparente normalidad, por lo que no cabe descartar que pueda comenzar a entrar en los planes de Idiakez, más aún ante la baja de Igbekeme.
Bajo el mando del técnico vasco y sus ayudantes, el equipo ha empezado a pensar en el Lugo en un entrenamiento intenso y en el que se ha combinado el trabajo con balón con la puesta a punto física que permita afrontar con garantías el próximo compromiso. Una oportunidad perfecta para dejar atrás las penas tras la derrota y volver a sentir el dulce sabor de la victoria. Especialmente importante para mantener enganchada a la afición que una semana más volverá a abarrotar el estadio municipal de La Romareda con la esperanza de llevar en volandas a su equipo en el camino hacia el ansiado ascenso.