Jorge Lorenzo pone a Maverick Viñales al nivel de Marc Márquez o Valentino Rossi: "No tiene nada que envidiar"
-
Jorge Lorenzo no duda en elogiar a, ahora, su piloto
-
Carmelo Ezpeleta insiste en que MotoGP podría correr en un circuito urbano de F1, pero con una condición
El 2026 promete emociones fuertes en MotoGP. Con la parrilla cerrada desde hace semanas y con la pretemporada como próximo punto importante, son varias las noticias de calado que van surgiendo en clave motociclismo. Una que ya ha dado la vuelta al mundo por su carácter significativo es la unión de Jorge Lorenzo y Maverick Viñales. El ex piloto mallorquín se encargará de guiar a Viñales durante toda la temporada, convirtiéndose en su 'coach' personal. La idea de esta acción es clara: hacer que el piloto de KTM sea capaz de ganar carreras y luchar por el Mundial. Más allá de la propia noticia, ambos ya han compartido sus impresiones en 'Duralavita'.
Lorenzo lo tiene claro con Viñales. "A ver si le hacemos, no sé si campeón, pero quiero que gane muchas carreras y haga muchos podios. A nivel de talento, Maverick siempre ha sido como los cuatro o cinco magníficos, yo lo compararía, a nivel de velocidad pura no tiene nada que envidiar. Quizás Casey Stoner es el único que tiene algo más, o algo especial, en cuanto a talento puro. Pero no tiene nada que envidiar a Valentino Rossi, Dani Pedrosa, o incluso a Marc Márquez o a mí. Siempre le digo que, si pilotos con menos talento y velocidad natural han conseguido pelear por mundiales, ¿por qué no lo puede hacer él?", se cuestiona el mallorquín.
Jorge Lorenzo, contento con su nuevo reto
"De esta colaboración ya se empezó a hablar hace un año, un poco más, cuando todavía estaba en Aprilia. Por A o por B, no cuajó. Pero las cosas llegan cuando tienen que llegar, y ahora se han dado las condiciones para hacerlo posible. Maverick va a cumplir 31 años, que no son pocos, pero tampoco es una edad donde empieces a bajar a nivel físico. Creo que es la edad perfecta, está muy maduro, muy receptivo, con mucha hambre. Me escucha en todo lo que le digo, me hace caso en casi todo, en meditación le cuesta un poco más", explica Lorenzo.
Por último, el propio Lorenzo hace una comparativa más que interesante. "Siempre comparo esta situación con la película de 'Rocky', con Apollo Creed y con Rocky. Porque al final, eso es una película, hay fantasía, pero eso es el deporte, la vida. El deportista, cuando consigue cosas importantes, fama, dinero... Le empieza a entrar el miedo, y se empieza a acomoda", zanja.