Los orígenes de la chaqueta verde del Masters de Augusta
Este domingo finalizó el popularmente conocido como Masters de Augusta, primer Major del curso de la PGA y que se celebra en el Augusta National Park, en Georgia, Estados Unidos.
El torneo, que en esta edición encumbró a Patrick Reed como campeón, tiene la costumbre de otorgar al campeón el privilegio de vestir una legendaria chaqueta 'Verde Masters' como premio por haber vencido en el torneo.
En ElDesmarque explicamos el porqué de este particular y prestigioso trofeo que nos ha dejado a lo largo de la historia imágenes icónicas y repletas de significado.
A pesar de que el Masters de Augusta se disputa desde el año 1934, no fue hasta 1949 cuando se instauró como tradición que el vencedor de la competición recibiese una de las chaquetas verdes que diferenciaba a los miembros del club, que en los primeros años se encargaban de ayudar a la organización del campeonato y de este modo se desmarcaban estéticamente del resto.
Fue por sugerencia de Bobby Jones, creador del certamen, por lo que se comenzó a entregar una chaqueta al campeón instaurando de este modo una tradición que va a llegar a los 70 años de antigüedad.
Jones, que decidió no dedicarse de manera profesional al golf porque lo consideraba un placer, fue uno de los mejores golfistas amateurs del mundo y en uno de sus viajes a tierras británicas, durante una recepción quedó asombrado por el hecho de que todos los miembros del club vistieran chaquetas rojas. Preguntó a uno de los portadores, y antiguo capitán del club Hoylake -cerca de Liverpool-, de las prendas sobre esta circunstancia ante lo que Stoker -que así era como se llamaba aquel hombre- lo retó: "A ver señor Jones, si gana el torneo esta semana, le daré mi chaqueta". Como no podía ser de otra forma, Jones venció el Abierto de Reino Unido y el Abierto Amateur antes de volver de forma triunfal, con la chaqueta roja bajo el brazo, a Estados Unidos.
Poco después, tras vencer en su país el Abierto de Estados Unidos y el Abierto Amateur, se retiró y dio forma al Augusta National Park donde crearía el Masters de Augusta en el que más tarde las chaquetas heredaron aquella tradición que Jones importó desde Inglaterra.
Curioso resulta descubrir que el campeón del torneo, al no saberse previamente de quién se va a tratar, recibe el ansiado trofeo de manos de otro socio del club de su misma constitución física con la 'obligación' de devolverla el siguiente año. Desde ese momento, la chaqueta a medida permanece custodiada en el club hasta que el dueño que ha conseguido la prenda con su victoria en el campeonato vuelva a pisar el club bien sea participando en el mismo o visitándolo por placer en otro momento. Tras la entrega, se le toman medidas y se le encarga la mítica chaqueta cuya tela se elabora en la fábrica Bower Roebuck, en el condado de West Yorkshire (Inglaterra), y tras ser teñida se confecciona en la empresa Henry Poole Co. de Londres.
De manera habitual desde que se decidió que la chaqueta se entregara como trofeo, el campeón recibe la prenda de manos del que lo precedió en lo más alto del podio pero si el campeón repite triunfo, es el presidente del club quien hace entrega del prestigioso premio.
Además, el campeón recibe también una réplica del trofeo expuesto todos los años en la tienda de exhibición del torneo junto a la tienda de merchandising.