El pequeño gran Barça hace doblete con su triunfo en New Jersey

El Barcelona alevín se ha coronado con un doblete de prestigio tras ganar en una preciosa final de LaLiga Promises Internacional al Real Madrid por 3-2, con una remontada final tras ponerse por detrás en el marcador 1-2. Dos goles de Íker, el delantero blaugrana, el segundo servido en un córner por el pequeño gran Pau, fueron decisivos para dar el título al Barça, el segundo en una semana tras imponerse en Villarreal hace apenas una semana.

El Barcelona, un equipo que gusta de llevar el control del encuentro, superior a sus rivales pero no arrollador, ha hecho válida la fórmula e ilusiona a los suyos con un par de jugadores de futuro. Sobre todo el pequeño Pau, con actitudes de madurez sobre el campo que asombran, e Íker, killer donde los haya. Es además un triunfo emotivo, porque lleva dedicatoria especial para 'Solo', un compañero del equipo que no pudo viajar a Nueva York.
El Barcelona llegaba a la final sin haber recibido ni un solo gol, pero a pesar de adelantarse luego vio cómo encajaba dos tantos por parte de De Llanos, también en córner el segundo. El Real Madrid compitió al máximo y se puso por delante en la segunda mitad, pero el Barça no se desesperó, apeló a su fútbol control, con el pequeño Pau como cabeza pensante, hasta ir superando el planteamiento madridista.
Con el partido igualado 2-2, un saque de esquina de Pau fue rematado de manera impecable por Íker, que ya había marcado el segundo. El éxtasis blaugrana llegó con ese segundo y decisivo gol. 
Ambos equipos llegaron a la final por méritos propios. El Barcelona, impecable, ganándolo todo y sin recibir ni un gol. El Real Madrid, quizás menos controlador pero con mucha pegada. Algo así como una traslación de los primeros equipos, como una traslación del Clásico fue la final de la Liga Promises Internacional.
Las semifinales se presentaban de forma diferente. Mientras que el Barcelona era claro favorito ante el Valencia, la del Real Madrid y el Villarreal aparecía mucho más abierta. De hecho el Villarreal eliminó al Real MAdrid en la semifinales de LaLiga Promises en la misma localidad castellonense hacía solo una semana. Pero esta vez fue diferente.
El Barcelona, que acudía a las semis sin recibir ni un solo gol, superó claramente al Valencia, que puso pelea, pero poca resistencia ante un Barça que dominó y marcó pronto. El Villarreal sí fue un hueso más duro de roer. El Real Madrid, de hecho, alcanzó la final después de sufrir y aliarse con la suerte en algún disparo y alguna ocasión de Enrique. Eso sí, Jacobo, el central, limitó mucho al posiblemente mejor jugador del torneo, delantero del Villarreal.