Sevilla puso la magia en el regreso La Roja
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| España - Inglaterra | |
| 2 | 0 |
| Goles: 1-0, Villa (m. 35), 2-0, Llorente (m.82) | |
Villa marcó por sexto encuentro consecutivo-Piqué debutó de titular y sólo un sevillano, Sergio Ramos, salió de inicio-Llorente anotó su primer tanto con la selección
Sevilla no falló. El Sánchez Pizjuán se vistió de gala para albergar, 14 años después, un partido de la selección española. Y lo hizo a lo grande. El lleno a rebosar que registró el feudo de Nervión hizo rememorar grande noches de fútbol internacional. La ciudad favorita de la selección y su estadio talismán (nunca ha perdido el combinado nacional en el Sánchez Pizjuán) fueron los perfectos anfitriones de un encuentro en el que la palabra amistoso no tuvo cabida. Desde que los himnos empezaron a sonar antes del choque se pudo percibir en el ambiente que este iba ser un duelo entre rivales acérrimos. Inglaterra salió mandona, dominante y atrevida. Cerró espacios y se lo creyó durante más de 20 minutos, pero terminó sucumbiendo. España se desperezó, se quitó de encima el miedo escénico y empezó a tocar. El toque condujo al fútbol, el fútbol al peligro y el peligro al gol de Villa en el 35. El ‘Guaje’ se encontró con una pelota en el punto de penalti y se sacó un doble regate de la chistera para batir a James con suavidad y provocar el delirio de la hinchada. España volvía a marcar en Sevilla tras más de ocho años de sequía y la afición lo disfrutaba como la ocasión lo reclamaba. Los de Capello se abonaban al sufrimiento y los de Del Bosque a ese fútbol de pases cortos que termina por desesperar a los rivales. Así se llegó al descanso.
Tras la reanudación, partido gris de los nuestros que cedieron el control a una Inglaterra renovada con Lampard, Beckham y Crouch en punta. Del Bosque dio sitio a Reina en portería y a Arbeloa en el lateral izquierdo. El ritmo de juego decayó y los visitantes intentaron acercarse a los dominios de los españoles con más corazón que cabeza. Sin embargo, fue Llorente el que estrenó su casillero como goleador con la selección de un impecable testarazo en el 38 de la segunda. Poco después de matar a los británicos ser tuvo que retirar lesionado. En definitiva, una victoria justa y sin demasiado brillo pero que mostró una gran superioridad de la, hoy por hoy, mejor selección de Europa y, probablemente del mundo. El Sánchez Pizjuán no olvidará nunca su 50 cumpleaños.
