Marcelino ya tiene su Montjuic y las cuentas del Valencia CF

El Valencia CF de Marcelino ya tiene su Montjuic. su victoria contra viento y marea, en circunstancias especiales, y que, como sucedió en tiempos del gran Rafa Benítez, le puede servir de punto de inflexión. Ese triunfo se dio este sábado en Getafe, se dio cuando nadie lo esperaba, y gracias a que el VAR, al fin, sonrió e hizo justicia con el Valencia CF. Marcelino García Toral se había ganado el crédito suficiente para que esperáramos a que tuviera su reválida, el resurgir necesario y deseado. Ganar más de un partido de forma consecutiva era cuestión de tiempo y ha llegado.

Me dolió escuchar la pitada que le dieron contra el Girona. Yo tampoco entendí aquel cambio, pero fue la gota que colmaba un vaso lleno de intranquilidad y de ansiedad, no de falta de confianza en el proyecto -al menos en mi caso-. No hay valencianista que no viera el choque contra los catalanes que no reconociera que los de Marcelino merecieron ganar. Por fortuna, el fútbol empieza a devolver al proyecto la inversión realizada con las victorias en Champions y en Liga ante Young Boys y Getafe. Desde esa calma estoy seguro que hasta el bueno de Rodrigo -que falló lo indecible en el Coliseum- volverá a parecerse al internacional que se ganó el 9 en el Mundial de España.

Por fortuna, el fútbol empieza a devolver al proyecto la inversión realizada con las victorias en Champions y en Liga ante Young Boys y Getafe.

No puedo ser cínico con las cuentas del Valencia CF

Cambiando de tema no puedo pasar por alto la situación financiera de la entidad. Ojear las cuentas del Valencia CF da pavor: Casi 400 millones de euros de deuda, presupuestos multimillonarios que arrojan cero beneficio... 36 millones de pérdidas en el ejercicio anterior.. Da vértigo, pero también les digo una cosa, a nadie nos puede sorprender los números que presentarán los gestores el 7 de diciembre. Lo primero, porque estábamos avisados en julio (lo dijo Mateo Alemany) y lo segundo porque todos hemos aplaudido la receta. Ante la necesidad vital de seguir en Champions y, gracias a ello obtener ingresos para estabilizar el club, sólo había dos salidas. La elegida, que es invertir en hacer una plantilla cara que vale 258 millones de euros, o la conservadora, que era ahorrar, vender y no invertir.

Mateo el pasado 5 de julio, doy por hecho que con el respaldo de Anil Murthy, Kim Koh y Peter Lim en último caso, ya anunció su preferencia: "Si queremos tener un equipo competitivo debemos aumentar nuestro Fair Play Fincieron. Para aumentarlo debemos vender jugadores. ¿Queremos tener el mismo FPF de 110 millones de euros? ¿O preferimos llegar a 150 aunque eso genere déficit? Para mí está muy claro. Preferimos tener más FPF, invertir más, aunque eso genere un déficit. Nos hemos quedado muy lejos de los clubes de arriba y para acercarnos debemos invertir y seguir arriesgando". Ahora estamos en ese escenario, hemos subido y subido sin mirar atrás y sólo queda un camino: volver a jugar la Champions y hacerlo año tras año o la muerte deportiva a pellizcos, por decirlo suavemente.

Que genera respeto y ansiedad, no se lo niego a nadie. De hecho, el que escribe es un poco cobardica y estas cosas me dan pavor, pero hay que ser consecuente y tampoco podemos rasgarnos las vestiduras y sorprendernos por una política financiera que conocemos desde hace meses. Además, el que no se arriesga no gana y en el riesgo está la emoción, que diría aquel. Feliz semana.

David Torres

Delegado de ElDesmarque Valencia